Las altas temperaturas se avecinan y uno tiene que tomar las precauciones correspondientes para prevenir cualquier daño en la piel debido a los rayos solares y/o insolación. El verano es sinónimo de temperaturas que oscilan entre 24º C y 29º C aproximadamente, por ello en ConTuFamilia queremos compartir con vosotros algunos consejos para cuidar nuestra salud del sol en este verano.
Existen diversas precauciones que deben tenerse en cuenta en nuestro día a día, no sólo hay que cuidarse en circunstancias de directa exposición solar. Al salir a la calle también es importante tener en cuenta los siguientes consejos:
Vestimenta: Se recomienda vestir ropa ligera, tejidos livianos como lino, algodón, entre otros. La ropa ligera evita que el cuerpo concentre demasiado el calor.
Líquidos: Es importante estar bien hidratados para evitar cualquier deshidratación del organismo, y provocar desmayos, mareos , etc. En verano el cuerpo tiende a sudar lo que provoca una pérdida de agua del organismo. Al salir de casa lleva contigo una botella de agua o zumo para beber poco a poco e ir hidratando al cuerpo.
Protección solar: Los daños solares son conocidos ya por todos. La contaminación de nuestra atmósfera hace que los rayos de sol sean más fuertes provocando daños en nuestra piel si la exposición es muy elevada. Por ello es importante no sólo aplicar protector solar al ir a la montaña o a la playa, sino también aplicarlo en nuestro día a día, al salir a la calle. En los últimos cuatro años el cáncer de piel o detección de melanomas, ha aumentado en un 40% en España. Por lo que se recomienda potenciar las medidas de precaución, en especial de pieles sensibles como los niños y jóvenes. Es importante por ello elegir correctamente el tipo de protección, que sean superiores a 25, 30 o 50 de filtro solar.
Gorros y gafas: El uso de complementos como gafas de sol y gorras son perfectos aliados para evitar insolaciones, como también proteger nuestra salud visual. Recuerda de utilizar gafas homologadas por la Unión Europea y que garanticen la protección adecuada para cada caso y ojos.
Alimentación: Evita las comidas que necesitan mayor esfuerzo o tiempo de digestión. Opta por alimentos frescos, frutas y verduras y aumenta el consumo de líquidos.
En verano las medidas de precaución para evitar problemas de insolación y daños en la piel por alta exposición solar se intensifican. ¡Cuídate y disfruta de un verano sin incidentes!