Con el verano llegan las altas temperaturas diurnas y las noches de bochorno. Dormir bien en verano es a veces complicado porque el hogar acumula el calor por el día y luego por la noche aparte de no refrescar demasiado en el exterior es muy complicado conciliar el sueño. A la larga esto provoca importantes trastornos que pueden perjudicar a la salud al no descansar correctamente. A continuación os damos algunos consejos para dormir bien en verano.
- La habitación donde se va a dormir cada noche debe permanecer con las ventanas cerradas y con las persianas bajadas. Para temas de ventilación lo mejor es abrirlas a primerísima hora de la mañana y durante sólo 5 minutos, que es el tiempo suficiente para que el oxígeno se regenere.
El consejo estrella es comprar un aparato de aire acondicionado que mantenga la temperatura de la estancia entre 20 y 23 grados, ya que para dormir adecuadamente es importante que ni haga frío ni calor. - Otra opción más económica para dormir bien en verano es colocar un ventilador que mande el flujo de aire hacia la zona de la cama para mantenerse fresco. Un buen consejo para potenciar este sistema es colocar un plato con hielos enfrente del aparato para que la corriente sea mucho más fría. El problema es que sólo durará durante unos 40 minutos, dependiendo de la congelación que tenga. Puede ser suficiente para poder conseguir el primer sueño.
- Antes de acostarse una ducha fría es lo mejor, pues de esa manera se refresca el cuerpo y se reduce la temperatura corporal, teniendo una sensación mucho más agradable dentro de cama. A lo largo de la noche se puede repetir esta ducha si el bochorno llega a ser muy fuerte. Ya encima del colchón las sábanas mejor que sean de algodón ya que transpiran mucho más y no dan tanta calor. Además es adecuado no moverse mucho durante el transcurso de las horas ya que así se suda menos y el cuerpo está más fresco.
- Evitar el pijama y dormir desnudo ayuda a tener menor temperatura corporal. También estirar brazos y piernas para que las extremidades no estén pegadas y produzcan mayor sudoración.
- Si vivimos en una casa de varias plantas la mejor opción es siempre dormir en las inferiores, ya que cuanta más altura, mayor será la temperatura que exista en las habitaciones. Incluso dentro de la propia estancia es mejor dormir en el suelo encima del colchón que en la altitud que pueda tener la cama.
- Si dormimos en pareja es recomendable dormir lo más separados posible. Al juntarse los cuerpos sólo se produce más calor, lo cual causa una peor sensación a la hora de intentar conciliar el sueño. Tener dos camas ayuda a evitar este problema pero si sólo se dispone de una ésta tiene que ser lo más ancha posible para que exista separación suficiente y se pueda dormir bien en verano.