En el artículo anterior, hemos compartido con nuestros lectores algunos consejos para dormir mejor. Muchas personas, actualmente, experimentan problemas de descanso que repercuten en su vida diaria y en sus actividades, sintiéndose ofuscados al no encontrar una solución fácilmente identificable.
A pesar de que los consejos que explicaremos a continuación, son consejos que pueden ser clasificados como “consejos cotidianos” o “consejos de hábitos saludables“, pueden provocar importantes consecuencias en cuanto a lo que se refiere a mejorar el descanso y la calidad del sueño al dormir.
Venimos de la parte anterior…
3) Ambiente
El ambiente en el que dormimos es fundamental. Sin embargo, tenemos que “setearlo” o configurarlo para que podamos sentirnos cómodos en él. Antes de acostarte a dormir, puedes prender luces bajas, poner música suave, prender una esencia con algún aroma que te resulte agradable, calentar el aire para que no sientas frío y todo lo que se te ocurra que facilite la comodidad de ese espacio.
4) Utilización del Dormitorio
El dormitorio sólo deberá ser utilizado para dormir y para tener relaciones sexuales, pero para nada más. Retira todos los dispositivos electrónicos: televisores, computadoras, equipos de audio, teléfonos y demás. El dormitorio será el lugar en el que deberías descansar. Si no puedes dormirte, levántate de la cama, y ve a la cocina, o al comedor. Cuando tengas sueño, vuelve a la cama y así sucesivamente. Este consejo acostumbra a tu cuerpo a que cuando está recostado en tu habitación, se relaje.
5) La Cena
No comas e inmediatamente vayas a acostarte a dormir. Procura cenar algunas horas antes de ir al dormitorio. De ésta manera, dejarás que tu cuerpo se encargue de finalizar las funciones digestivas y luego se “centre” en las funciones de descanso.
Esperamos que éstos consejos te hayan servido mucho y que, de ahora en adelante, puedas dormir y descansar mucho mejor.