Revista Cocina
PREPARAR EL CAMINO
Existen tantos caminos como caminantes. En realidad, las vías utilizadas por los antiguos peregrinos para alcanzar Santiago. Destacó por su importancia histórica y estratégica el llamado camino francés, con sus dos vías de entrada. Roncesvalles top (Navarra ) y Somport (Huesca). Ambos se unen en el puente de la Reina (Navarra ).
ANTES DE SALIR
- Entrena con botas y mochila.
- Calcular el punto de partida en función de dos días disponibles, a una media de 20 a 25 km diarios.
-. Es preferible empezar a pintar de camino, que salvar tramos intermedios en coche.
-Elige la época correcta; en verano los albergues están masificados. En invierno las condiciones de climáticas son muy duras.
- Solicita la credencial en el punto de partida; sí ella no se accede a los refugios.
- Incluir una carta de presentación de una parroquia, el una asociación de amigos del camino por sí no quedan credenciales.
- Planifica las dos primeras etapas más cortas que la siguientes; en las primeras etapas son donde más se retiran los peregrinos por tendiditis y ampollas.
EL EQUIPAJE
Después de unas malas botas, el exceso de peso es el mayor enemigo del caminante. Resulta frecuente ver peregrinos en estaciones de tren, autobús facturando a casa un paquete con todos los objetos y innecesarios que trajeron. El un buen consejo es que camines antes de hacer el viaje, durante diez kilómetros con un peso aproximado (en tu mochila )de diez kilos aproximados.
La mochila y el calzado han de se de buena calidad, ropa de algodón en verano y forro polar y anorak de montaña para el invierno.
MOCHILA
Debe estar en consonancia con el peso a transportar. Muy pequeña obliga a dejar cosas fuera colgando. Demasiado grande es una tentación para llenarla de objetos innecesarios. Adquirirla en un establecimiento especializado. Todo un año de preparativos e ilusiones se pueden ir por la borda por culpa de una mochila que produzca roces o dolores de espalda.
TRUCOS PARA HACER UNA MOCHILA
- Unos impredecibles sirve para colgar la ropa húmeda en la mochila. Así se seca mientras caminas.
-Un mismo bote de jabón líquido puede usarse para el aseo personal y para lavar la ropa. Se ahorra peso.
- Los ronquidos en los albergues son de espanto, unos tapones de oídos aliviarán la serenata.
- Los objetos más pesados ha de ir al fondo de la mochila pegados al cuerpo.
- Llevar siempre un rollo de papel higiénico en los albergues se termina pronto.
- Apuntar en un papel los teléfonos más importantes, para no tener que cargar con la agenda.
- Salvo excepciones, las almohadas de los refugios están muy sus vidas, una funda almohada no pesa y evita el contacto con ellas.
Si el segundo par de calzado, es necesario para que los pies descansen en los refugios, es de goma, pueden utilizarse también en la ducha sin necesidad de cargar con otras zapatillas.
DOCUMENTACION
Además de una credencial, añadir el DNI, o pasaporte, la tarjeta seguridad social o de el seguro médico y una tarjeta de crédito. No llevar mucho dinero en efectivo; a lo largo de la ruta abundan los cajeros automáticos.
SACO DE DORMIR
Es necesario para pernoctar en los refugios donde no hay sábanas y sólo algunos ofrece mantas. En verano uno ligero de fibra sirve; el invierno es mejor llevarlo de pluma natural o sintética, ya que en los albergues hace mucho frío y son pocos lo que cuentan con calefacción. Incluir una esterilla aislante para cuando no queden camas o se desee dormir a la intemperie cargar con una tienda de campaña es poco aconsejable sino no se lleva vehículo de apoyo. La autonomía pero, por liviana que sea, añade dos kilos más a la mochila. En verano, cuando los refugios se saturan, en pueblos y ciudades se habilitan gimnasios, polideportivos, escuelas e incluso cocheras particular para los peregrinos, por lo que un techo nunca va a faltar. También son frecuentes las localidades que instalan grandes carpas de lona y servicios con muchas para recoger a los caminantes.
UTENSILIOS DE COCINA
Cargar con collas y sartenes es otro error. La mayoría de los refugios cuentan con cocina, equipada con los utensilios más elementales. Muchos tienen frigorífico y algunos hasta microondas. Puede ser interesante llevar los cubiertos propios y como mucho, un pequeño cazo. Se espera de los peregrinos que limpien la cocina después usarla. Como por desgracia esto no siempre ocurre así, en algunos albergues sólo se permite calentar alimentos, pero no freírlos.
CALZADO
Es la pieza fundamental de el equipaje. Nunca, nunca, estrenar unas botas para hacer el camino. Llevar unas viejas y cómodas, ya utilizadas con anterioridad. Sí son nuevas andar muchos kilómetros antes con ellas, para comprobar posibles roces. En verano sirven unas ligeras de trancking que sujetan el tobillo y no agobian demasiado el pie. Deben llevar un buen dibujo en la suela. En invierno, unas con refuerzos o gore-tex, el aíslen el barro y de la lluvia. Hay quien logra hacer el camino con unas zapatillas de deporte en incluso con sandalias, pero no es el calzado más aconsejable para las articulaciones, sobre todo en los tramos de montaña
Incluso una zapatillas livianas y cómodas para que los pies descansen al llegar a los refugios.
BORDON
No es un elemento decorativo de la iconografia medieval. Un buen bordon ayuda a caminar por terrenos escabrosos o resbaladizos. En los bosques pirenaicos es fácil encontrar una buena vara de roble o pino.
LO QUE SIEMPRE SE OLVIDA
Una gorra un sombrero, para protegerse del sol, bañador, crema protectora para el sol, cacao para los labios en invierno, bolsa de aseo, toalla pequeña, aguja e hilo para ampollas, mechero, cantimplora y un cuaderno de notas.
BOTIQUIN BASICO
-Tijeras,
-Esparadrapo.
-Vendas de algodón y elásticas.
-Aguja e hilo para las ampollas.
-Alcohol.
-Desinfectante.
-Crema antiinflamatoria.
-Aspirina o paracetamol.