Un equipo de
científicos del Hospital Infantil de Boston ha desarrollado un método para
promover el crecimiento del axón después de una lesión, estos hallazgos fueron publicados
en la revista Neuron. El equipo desarrolló un
cóctel terapéutico de moléculas, que se administran a un organismo ya sea con lesión
de médula espinal o accidente cerebrovascular y se logra recuperar la
motricidad fina. Para investigar si esta combinación influiría en la
recuperación funcional, el equipo estudió un modelo de ratón con lesión de la
médula espinal. Sin intervención los ratones fueron poco a poco recuperando
algunas de las principales funciones motoras de sus axones. Sin embargo, los
grandes déficit se mantuvieron en sus habilidades motoras finas. En contraste,
cuando los ratones fueron inyectados con IGF1 y OPN un día después de la lesión
de la médula espinal, sus habilidades motrices finas mejoraron grandemente. En
la semana 12, el equipo observó que las tasas de error de los ratones en la
escalera irregular se redujo al 46%, mucho mejor que el grupo de control no
tratado, que todavía continuó cometiendo errores. Estudiando un modelo de ratón
con accidente cerebrovascular, el equipo observó sorprendente que el axón
brotaba en la médula espinal y también encontraron algo inesperado el axón broto
en el área subcortical. Mediante la manipulación genética, el equipo eliminó
los axones brotados del CST y encontró que la mejora disminuía. Esto significa
que la recuperación funcional no fue particularmente dependiente del brote en
las regiones subcorticales, sino en las de la médula espinal. El equipo ahora
va a llevar este trabajo a ensayos clínicos con animales y humanos.