Poca gente en España y aún en Barcelona, tendrán información sobre que esa bullente ciudad comercial y luego industrializada, no tuvo puerto de atraque para barcos hasta 1477.
El 11 de septiembre de ese año se clavaron las primeras estacas de lo que iba a ser el espigón y escollera, un lugar seguro para los barcos que traían mercaderías a un arenal y tenían que descargarlas casi en alta mar. A donde iban a recogerlas con botes y barcas de bajura.
El Puerto del Nuevo Mundo, una nueva novela de Xulio Ricardo Trigo para la Editorial Temas de Hoy, expone con rigor y toda la posible información disponible, el proceso de construcción de una instalación tan necesaria a una urbe en proceso de expansión renacentista.
Con unos personajes ficticios entreverados con hechos reales, se asiste en el relato a las idas y venidas de los responsables de las obras, entre el otoño de 1477 y el de 1481, once años de luchas y adversidades apasionantes.
Los sueños del ingeniero siciliano Stassi, su diseñador, y del cartógrafo Lluís Esquiva que lo secunda, contagian su ilusión a Marcel Roqueta un adolescente que vive el proceso en primera fila y se implica más de lo que pensaba.
No faltan las interferencias de los Consellers del Cent, responsables últimos de los pagos y el presupuesto preciso aportado por la ciudad, exigiendo el final de las obras cuando advierten el retraso y la lentitud exasperante del proceso.
Y, como exigencias del guión, se incluyen tramas amorosas y crímenes con asesinatos bien dosificados, con algún tinte morboso, convirtiendo un argumento histórico en una historia dramatizada sobre un suceso real.
Una apasionante novela histórica, que se lee con fruición, debido a su escritura fluida y los bien construidos personajes.
Luis Conde Martín