Revista Cine

Consumido, de Joe Matt

Publicado el 07 junio 2011 por Juancarbar

Consumido, de Joe Matt

Ha costado que la esperada última obra de Joe Matt entrara en mi plan de adquisiciones y lecturas, pero finalmente ha acabado entrando. Y es que, de ser una compra segura cuando se anunció, pasó a la categoría de “descartadas” de un plumazo debido a los veinte eurazos con que se desmarcaba Fulgencio Pimentel (eso sí, en una edición más que digna, con un estupendo papel y un gracioso marcapaginas de propina). Sin embargo y, tras barajar varias opciones de autoengaño –Día del Padre, Día del Lector del Cómic, Día de Apoyemos a Joe Matt y a Fulgencio Pimentel…- me pilló en una hora baja y, preso de mi compulsiva pasión completista, me hice con el tebeo para alegría de mis libreros habituales y consternación de mis recargadas y caóticas estanterías.

Consumido, de Joe Matt
Tras consumirlo, ¿merece la pena el desembolso? pues depende. Si nunca has leído un tebeo de Joe Matt, yo buscaría el “Pobre cabrón” de La Cúpula para saber si el particular tono pajillero y autoparódico de este particularísimo autor/personaje/freak puede llegar a gustarte; si ya lo conoces de antes, en “Consumido” encontrarás más de lo mismo, pero, más allá del patetismo un tanto idiota de su cerrado universo, se perciben sutiles matices que te pueden convencer, como me han convencido a mí, “Consumido” es un tebeo que bajo su aparente ligereza esconde al más inconformista y legítimo heredero de lo más granado del “slice of life” underground del Crumb de “Mis Problemas con las mujeres” y el Pekar de “American Splendor”, por no ir más allá del ámbito del Cómic y acordarnos de tipos tan recomendables como Bukowski o Allen.

“Consumido” se resume en su fantástica portada. El solitario Joe Matt esconde su rostro en la almohada -¿duerme? ¿medita sobre la actividad creativa?¿se hace una paja?…- mientras se estira sobre una cama deshecha rodeado de papeles arrugados – ¿el fruto de su labor creadora?¿la consumación de la paja?…- y desperdigados . Si uno no se desanima o no le presta demasiada atención al aviso sobre el contenido, descubrirá entre sus páginas las paranoias patéticas de siempre del autor –su obsesión por el dinero, su obsesión por el porno, su obsesión por su antigua novia, su aislamiento, su pereza-, agravadas por el paso de los años y los fracasos, junto a sus contadas virtudes – la relación con sus amigos, Seth y Chester Brown y el coleccionismo de tiras antiguas, como “Gasoline Alley” de la que posee una completísima colección – retratadas en el consabido tono tragicómico.

Consumido, de Joe Matt
Sin embargo, más allá de convertirse a sí mismo y su vida en motivo de mofa y escarnio público en una valiente -¿masoquista?,¿suicida?- decisión, Joe Matt se muestra como el “novelista gráfico” más cercano y accesible de sugeneración, capaz de pasar sin dificultad del humor grueso a la introspección crítica, especialmente respecto a su propia obra –atención al análisis que realiza de sus anteriores trabajos- apoyándose en su capacidad para entablar un constante y brillante canal de comunicación con el lector en una vía quizás no tan innovadora y elitista, pero sí mucho más cercana y popular, que la de sus cerebrales e infalibles amiguetes, Seth y Chester.

Precisamente, quizás sea la calculada ingenuidad con la que Matt muestra su humanidad y escarba en sus defectos aprovechando su talento narrativo lo que a mí más enganche de su obra y genere la simpatía del lector, alcanzando en ese caso en “Consumido” un nivel de refinamiento superior que en anteriores trabajos, aunque, no nos engañemos tampoco, cae en la sobrexplotación de situaciones aparecidas en anteriores trabajos que han perdido parte su capacidad de sorpresa debido a que en su anodina vida (bueno, como en la de la mayoría de nosotros, supongo) tampoco han sucedido nuevos hechos extraordinarios y se encuentra en punto muerto.

En fin, me haré a la idea que me he encontrado a un viejo amigo que me ha sableado veinte euros a la espera de futuras e improbables entregas en las que nos cuente novedades como su regreso a Estados Unidos…

Pablo de Blas Andrada.

Tags: consumido, joe matt


Volver a la Portada de Logo Paperblog