Contador líder tras la 1ª semana del Giro d’Italia

Gran victoria de Benat Intxausti (Movistar) tras atacar en el último puerto de la 8ª etapa del Giro d’Italia. Alberto Contador (Tinkoff-Saxo) resistió sobradamente los ataques -no del todo ambiciosos- del resto de favoritos y sigue líder.

Se completó la primera semana de la gran vuelta italiana con Alberto Contador (Tinkoff-Saxo) en cabeza de las clasificaciones. Tras la excelente contrarreloj inicial de las filas del equipo ruso (San Lorenzo Mare-San Remo, 17,6 km) el pinteño quedó a escasos segundos del liderazgo en la general, en los pedales de Michael Matthews (Orica-GreenEdge). Los finales en esprínt masivo en la segunda etapa (Albenga-Genova, 177 km) con victoria de Elia Viviani -Sky- y en la tercera (Rapallo-Sestri Levante, 136 km) con victoria del líder Matthews, dieron lugar a una más que movida cuarta jornada (Chiavari-La Spezia, 150 km) con un puerto cat. 1 a poco de meta. Fue un día de ataques que quedó en manos de Davide Formolo (Cannondale-Garmin) pero seleccionó a un lote integrado por Contador, además de Fabio Aru (Astana) y Richie Porte (Sky), entre otros. El pinteño continuaba acechando el liderazgo en la general. Al día siguiente y con el primer final en alto (La Spezia-Abetone, 152 km) Contador se hizo con la general escoltado por Aru y Porte, mientras Janc Polanc (Lampre-Merida) ganaba la etapa. Los finales en esprínt de la sexta etapa (Montecatini Terme-Castiglione della Pescaia, 183 km) con victoria de André Greipel (Lotto-Soudal) y la séptima (Grosseto-Fiuggi, 264 km) con victoria de Diego Ulissi (Lampre-Merida) no modificaron el cuadro general. Sólo sería trastocado con un nuevo final en alto, y eso llegaría en la siguiente jornada.

La etapa 8 del Giro (Fiuggi-Campitello Matese, 186 km) tuvo fin en un puerto de cat. 1 con un ascenso final de 16 km de longitud que desde el 2002 no se subía en el marco de la gran vuelta italiana. En aquel entonces la victoria fue para Gilberto Simoni. Ahora sería el terreno de Contador debía defender el liderazgo en la general.

Como era de esperar el pelotón se desarticuló más pronto que tarde. Aún sin rodar el meridiano del recorrido, a la fuga en solitario de Steven Kruijswijk (Lotto) le había salido un primer grupo perseguidor de Carlos Betancur (Ag2r-La Mondiale) y Franco Pellizotti (Androni-Giocattoli) y un segundo grupo en caza de nutrida composición. Detrás el pelotón rodando a rueda de Tinkoff-Saxo. A falta de 92 km para meta colombiano e italiano hicieron contacto con Kruijswijk, que los esperó, y el trío en cabeza de carrera emprendió el desenlace de etapa con un margen que no superaba el minuto.

El siguiente en unirse al frente de la carrera fue Kristof Vandewalle (Trek). Poco después, Pellizotti perdió rueda. De cara al último cuarto de la jornada la fuga mantenía un margen de 1′ con respecto al grupo perseguidor de nueve corredores y 7′ del pelotón’. Escapados y perseguidores tenían posibilidades de finalizar la jornada con éxito.

A los pies del ascenso del último puerto, las diferencias entre los tres grupos de corredores continuaba estable. Controlando el margen de tiempo suficiente y necesario para conservar el liderazgo provisional en la general de Contador, el Tinkoff-Saxo cedía protagonismo al Astana de Aru. Betancur, Kruijswijk y Vandewalle mantenían el ritmo delante.

En las primeras rampas severas, a falta de 12 km de meta, los tres de adelante estiraron diferencias con el grupo perseguidor -que comenzaba a perder integrantes-. Atrás, en bloque Astana seguía tirando del lote, a menos de 4′. Adelante el primero en mover pieza, atacar y abrir hueco fue Kruijswijk. Betancur y Vandewalle, no obstante, persistían para mantenerlo a tiro.

A falta de 7 km Betancur perdió la rueda de Vandewalle, quien encaró en solitario la persecución de Kruijswijk. La esperanza colombiana cedía al ritmo de quienes decidirían la jornada. Detrás, el pelotón a rueda del Astana de Aru recortaba más y más las diferencias. Contador y Rigoberto Urán (Etixx-Quick Step) aún tenían un escudero y Porte dos.

Con 5 km por rodar llegaron las rampas más duras, del 12%. Kruijswijk lideraba con 25” con respecto a Vandewalle y dos compañeros más de ruta -uno de ellos Benat Intxausti (Movistar)-, y 1’51” con respecto al pelotón. Ese fue el momento que atacó Aru. Su compañero Mikel Landa, Contador, Porte y Urán lo siguieron. Después atacó Landa y nadie lo siguió -aunque nunca conseguiría ser cabeza de carrera-. Delante, Kruijswijk había sido alcanzado por Intxausti y compañía. Mientras el resto flaqueaba, el español del Movistar aparentaba ir más sobrado de fuerzas.

A 4 km de que los de adelante cruzaran meta, el pelotón se reagrupó gracias a los esfuerzos del Sky. Delante un ataque demoledor de Intxausti le permitió erigirse en nueva cabeza de carrera. Sería el ataque bueno, el laureado por la victoria.

Mientras Intxausti cruzaba meta para hacerse con una gran victoria, se repetían ataques entre los favoritos. Primero Aru, después Urán, finalmente Porte. Contador aguantó hasta meta para seguir siendo líder. Prueba de fuerza del pinteño, muestra de buen estado de forma del resto de favoritos a la general. Para ser local, se esperaba algo más de agresividad por parte del joven Aru.