En el mundo de la belleza se habla desde hace un tiempo de este método. El contouring es justamente una técnica que se utiliza para esculpir el rostro y lograr que se vea simétrico y ovalado. Se utiliza mucho en sesiones fotográficas, donde a través de la lente y con las luces correspondientes, el maquillaje logra verse natural, pero en vivo y en directo, el maquillaje puede verse sobrecargado. Esta técnica no se aplica en todos los rostros de la misma manera. Según la forma del rostro y lo que desees resaltar o disimular; es la forma de aplicarlo. El secreto para lograrlo es marcar los puntos de luces y sombras. Esto permitirá definir su formato y estilizarlo.
Es importante recordar que el contouring puede realizarse con bases cremosas o polvos compactos. En ambos casos debe esfumarse bien para que no queden líneas marcadas y resulte más natural. Los tonos que elijas deben ser los más cercanos a tu tono de piel. No se recomienda utilizar la técnica del contouring para un evento de día. Para lograrlo, se deben aplicar dos tonos diferentes de bases o polvos. El tono claro servirá para iluminar y el oscuro marcará la profundidad.