Sergio del Molino vuelve sobre «el país que nunca fue»
Hace ahora cinco años que se publicó La España vacía. Viaje por un país que nunca fue (Turner, 2016), un libro que entonces llamó la atención, entre otras cosas, por su inusual mezcla de géneros: algo de libro de viajes, junto con ensayo literario, novela, crónica social… Lo que sucedió después fue todo un fenómeno que le ha dado vida propia a ese libro y lo ha convertido ya en un clásico reciente sobre la mirada de un escritor a su país.
Contra la España vacía, en palabras del autor, «no refuta ni corrige mi libro anterior, sino que pretende rascar todas las capas de sobreentendidos que se le han ido pegando al título. Con las páginas que siguen trato de poner en orden lo que el ruido ha desordenado. Ahondo en lo que quería decir y no en lo que me atribuyen. En una discusión cuyo control perdí desde el principio y que nunca he guiado, siento ahora la necesidad de marcar algunas líneas en el tablero de juego. Este ejercicio me lleva inevitablemente de vuelta a España, a qué diablos es este país y por qué es importante seguir doblando las esquinas del mapa».
«He concebido este libro como un zoom que avanza desde el plano general de un mapamundi hasta la intimidad de las casas. Todos los temas están conectados y siguen un hilo de causalidades, por lo que no es recomendable la lectura salteada que hacen algunos con este tipo de ensayos, yendo en primer lugar a aquellas cuestiones que les interesan más.»
Pilar Álvarez, Directora Literaria de Alfaguara Hispánica comenta en una carta a los lectores que La España vacía generó una nueva conversación, llegó a los programas políticos, llenó librerías y espacios culturales, y acabó por convertir la despoblación en una sección fija de los medios y las agendas electorales. El asunto de «lo rural» y «lo urbano» volvió a ser un género literario, dando pie a una enorme bibliografía reciente. Y revitalizó, además, el ensayo como forma literaria para la generación más joven de escritores y lectores. Hoy la expresión «la España vacía» parece haber estado ahí siempre, pero nadie la había pronunciado hasta que la dijo Sergio del Molino hace cinco años.
Leer este libro inclasificable, que nos habla también de banderas y partidos, equivale a dar un largo paseo charlando con decenas de escritores, de Harari a Tolstói, de Solnit a Pla, cuyas ideas recoge Sergio del Molino mientras viaja por un país que nadie ha contado como él, y añade: «La mayoría de las reflexiones son fruto de vivencias, encuentros, conflictos y lecturas que me han salido al paso a raíz del éxito de La España vacía, por lo que, en rigor, escribo sobre asuntos muy personales que trato con la pasión, el partidismo y el compromiso que se espera de lo que te importa de veras. Este ensayo sólo quiere seguir alentando un debate ciudadano.»
Lee y disfruta de un fragmento del libro.
El autor:
Sergio del Molino (Madrid, 1979) es autor del ensayo narrativo La España vacía (2016), con el que ganó el premio al mejor ensayo del Gremio de Libreros y el premio Cálamo al mejor libro, además de entrar en las listas de «mejores del año» de toda la prensa cultural. Antes, se había alzado con los premios Ojo Crítico y Tigre Juan con La hora violeta (2013) y después con el premio Espasa gracias a Lugares fuera de sitio (2018). Además, es autor de novelas como Lo que a nadie le importa (2014) y La mirada de los peces (2017), el breve ensayo biográfico Calomarde. El hijo bastardo de las luces (2020) y de una autobiografía novelada sobre su relación con la enfermedad, La piel (Alfaguara, 2020). Es columnista del diario El País y colaborador de Onda Cero Radio, entre otros medios.
El libro:
Contra la España vacía ha sido publicado por la Editorial Alfaguara en su Colección Hispánica. Encuadernado en rústica con solapas, tiene 280 páginas.
Cómpralo a través de este enlace con Casa del Libro.
Para saber más:
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