El viernes pasado en la oficina, al ver a mi compañero Kermit disponerse a abandonar su mesa con un trolley de ésos pequeñitos que valen como equipaje de mano:
Yo - ¡Te vas de viaje! ¿Adónde vas?Kermit - No me voy; ahí hay una Play Station 4 -señala el trolley vagamente con el dedo-
...
Yo - Llevas una Play Station 4 en una maleta.Kermit - Sí. Tengo el lunes libre y acaban de sacar el Call of Duty nuevo -Kermit se encoge de hombros-, así que he dicho, me voy a comprar una Play Station 4. Y me la he comprado.
Y ya está.
Y esto os lo cuento para la próxima vez que penséis que ser adulto es una mierda. Es verdad que tienes que pagar facturas y hacerte la comida y fingir que tu cuñado te cae bien, pero también puedes pedirte el lunes libre y pasarte tres días del tirón jugando a Call of Duty sin dar grandes explicaciones. Vidas más duras se han visto.