Revista Salud y Bienestar
Esta historia la publicamos hace unos años. Como sigue siendo un tema de actualidad, creemos conveniente volver a publicarla para conocer vuestra opinión. Es una historia casi real...Tras 7 años como jefa de servicio de cirugía del Hospital de La Esperanza, empiezan a llegarte los problemas. Tu principal colaborador (el Dr. Fernández) ha decidido abandonar la asistencia hospitalaria y partir con una ONG a la República de Chad, para formar a médicos locales en nuevas técnicas quirúrgicas. Una pena, pero la vida es así, todo en constante movimiento.La primera decisión a tomar es la contratación de la persona que ocupe su puesto. Hace unas semanas acabaron la residencia 6 personas en la provincia y ofrecer un puesto de trabajo de larga duración es algo muy goloso, por lo que habrá candidatos de sobra para el puesto. Si te hubieran preguntado por tu favorito hace unos meses, la cosa estaría clara, pero ahora todo es diferente y la duda empieza a apoderarse de la decisión.El primer candidato para todos es Marina Gutierrez, la residente que se ha formado en la unidad. Buena profesional, poco innovadora y muy amiga de trabajar tal y como se ha hecho siempre en la unidad, sin cuestionar nada. Ha colaborado en algún proyecto de investigación y es un buena compañera, pero sigue dudando mucho a la hora de tomar decisiones. Su rotación externa fue en los centros de siempre, y no aprovechó para acudir al extranjero a algún hospital de renombre. Se ha especializado en cirugía colorrectal y su meta a medio plazo es quedarse en el servicio e ir mejorando poco a poco. Cuenta con algunos apoyos en el servicio y también con la fuerza de la costumbre, ya que si hay hueco, la tradición no escrita es que se quede el residente que ha finalizado ese año.La otra candidata es Ariadna Garrido, una riojana que ha estado rotando los últimos 4 meses en el servicio. Buena compañera y mejor médico, es una gran defensora de la medicina basada en la evidencia y acepta la responsabilidad de la toma de decisiones decisiones sin problema. Se ha especializado también en cirugía colorrectal y ha estado rotando dos meses en un hospital en Boston, además participa activamente en proyectos de investigación y escribe habitualmente en un blog sobre innovación quirúrgica. Lógicamente, para muchos, es la segunda en la línea de salida.El jefe de servicio es la persona que propone al candidato elegido. Y para evitar problemas, has decidido realizar una reunión en la unidad para que la decisión sea del grupo y no solo de una persona. La votación es algo más tensa de lo esperado ya que hay dos grupos muy claros: unos defienden a Marina ya que es función del servicio cuidar y motivar a los residentes y su contratación sería una muestra clara de que si trabajas bien puedes conseguir empleo; otro grupo prefiere a Ariadna ya que la consideran mejor médico y más acorde con la forma de trabajar del servicio, que necesita de gente dinámica, con ganas de aprender. Además, eligiendo a Ariadna se evita la endogamia y se selecciona al mejor.La votación se hace a mano alzada, y tras contar las manos, el resultado es de 7 a 7, y ahora es tu turno como jefa.¿Qué decisión tomas? ¿Marina o Ariadna?