Thriller, noir e investigación criminal en el mismo lote. El nuevo cómic de Carlos Portela y Keko bucea en las profundidades del alma humana desde su mismo punto de arranque (los delincuentes condenados por delitos sexuales) y lo hace con buenas dosis de suspense al ritmo de misterios ocultos y una pesquisa criminal en la que a nadie parece interesarle descubrir la verdad, más allá de una periodista que, en paralelo, realiza su investigación contra viento, marea, familia y directores de periódico.
Contrition se mueve dentro de unas claves que conectan con el género negro estadounidense más reciente: el de los thrillers de Fincher y Nolan, o series como True Detective. Por sus páginas desfila una galería de personajes reconocibles (la periodista, el sheriff, la agente de seguimiento de delitos sexuales, el sacerdote de mirada sombría, el director del periódico…), que el guion de Portela consigue dotar de humanidad, evitando la tentación del estereotipo. Los autores construyen su relato de vidas cruzadas a partir de un punto de vista alterno que, en una narración no lineal, nos lleva de un personaje a otro al mismo tiempo que se le revelan al lector las claves y los entresijos de una historia infectada de ponzoña y tan negra como pueda llegar a ser el alma humana.




