¿Te gusta ser atípico? ¿Diferenciarte y crear ese efecto wow? Pues bien, lo más probable es que huyas de convencionalismos y de decoraciones de catalogo, para realmente tener espacios creados con una esencia mágica, y casi sacada de la mejor revista de interiores. Para vosotros y para ellos, lo mejor es pensar en arriesgar, en dejarse guiar y en sorprender con combinaciones locas o menos tradicionales.
Así que como no podría ser de otra forma, evidentemente en cuestión de decoración e interiores, no podemos saltarnos esta norma ni en los dormitorios infantiles.
Quizás en estas estancias son en las que más hacen atrevernos a volar la imaginación, a integrar de manera arriesgada combinaciones de color hasta aptas y optimas para daltónicos.
Pero ¿y cómo realizar o inspirarse en algo diferente?
Para muestra hoy nos perdemos en este dormitorio infantil casi mágico y de ensueño.
Y no es que sea un espacio extravagante, excéntrico y casi irreal o como diríamos de catalogo, si no que se muestra como un espacio muy personal, lleno de detalles y en el que parece que recuperemos la memoria a un tiempo de sencillez.
Un espacio no excesivamente grande, pero si con el justo espacio de equilibrio y almacenaje.
Marcado por piezas que recuerdan a aires midcentury, pero con un diseño escandinavo y delicado con el que dependiendo del toque de color con el que lo hubiéramos combinado puede verse como un espacio más o menos masculino.
Un increíble papel de pared en espiga, o cómo no, juguetes que harán soñar y disfrutar a los peques de la casa esta vez con materiales tan naturales como la lana o el fieltro.
A veces alejarse de una decoración llena de convencionalismos, pasa por la mezcla y ese toque atrevido, alocado y lleno de personalidad. ¿Te atreves?
Una distribución cuyo espacio no deja ni resta zona de juego, y donde una iluminación pensada y creada para disponer mágicas sensaciones y composiciones durante todas las horas del día.
A mí sin duda, estos interiores tan diferentes y tan únicos a la vez me encantan, porque aun sin ser demasiado arriesgados, se convierten en el equilibrio preciso de estilo y función.
Y vosotros… ¿sois mas de arriesgar y diferenciarse o de seguir las pautas?