100 estampas de Salamanca
Las Claras es un antiguo convento de clausura de monjas clarisas, de estilo gótico-renacentista, fundado en 1238 por la Orden de las Franciscanas, hoy día convertido en Museo de Pintura Medieval de Salamanca por la Fundación Las Edades del Hombre, tras quedarse el convento vacío en 2019.
El Museo esconde un gran tesoro en su interior: la mayor colección de pintura mural de Castilla y León, una colección excepcional con iconografías que van desde la Edad Media hasta el Barroco.
El recorrido por este museo permite admirar en el coro bajo el conjunto de pinturas murales que recubren las paredes y representan distintas escenas religiosas, las más antiguas son del siglo XIII, la iglesia, con tres retablos, uno de los cuales fue creado por Joaquín de Churriguera, el claustro y su bello artesonado, para después detenerse en el coro alto, donde se expone una gran colección de objetos que pertenecieron a las religiosas, y desde allí, acceder al artesonado policromado que es parte de la cubierta que tenía la iglesia en los siglos XIV y XV, situado por encima de las bóvedas de Churriguera, descubierto gracias a una restauración realizada en 1988, que recuperó lo que había quedado oculto durante siglos.
A este techo de madera policromada se accede mediante unas pasarelas que permiten admirar la gran variedad de símbolos, cuya interpretación ha sido recientemente revisada, fruto de un descubrimiento del biólogo salmantino Raúl Tapia, quien centró su atención en los dibujos de un pájaro, raro en la zona, la chova piquirroja, y de la investigación de dos aficionados de la historia, Charo García de Arriba y Miguel Ángel Martín Mas, que indagaron los orígenes de los símbolos y escudos representados, en el que la chova piquirroja tiene un papel esencial.
Según los investigadores, los escudos heráldicos en el artesonado, con castillos, leones o la flor de lis, y los emblemas, hasta un total de 150, cuentan la historia de Doña Berenguela, la reina de Castilla y reina consorte de León, a su vez señora de Salamanca, hija de Alfonso VIII, y de Leonor Plantagenet, que dejó grabados los acontecimientos de su vida, un misterioso legado que ha permanecido oculto en Las Claras durante muchos siglos y que nos muestra la historia de la unión de los Reinos de Castilla y de León bajo su protección, como madre de Fernando III (quien después unió ambos reinos), un enigma descifrado gracias al dibujo de la chova piquirroja (emblema de Santo Tomas de Canterbury) que demuestra que la narración no podía referirse a otra reina que no fuera Berenguela, por su ascendencia real inglesa, difusora del culto a Santo Tomás Becket.
En el blog de los investigadores antes mencionados lachovapiquirroja.blogspot.com, viene narrado este descubrimiento, hasta concluir en la apasionante historia que Berenguela, una mujer sorprendente, valiente y audaz dejó relatada para la posteridad en el techo de un convento de Salamanca y que ahora podemos disfrutar.

CIEN ESTAMPAS DE MI TIERRA
