Revista Diario
Este fin de semana nuestros amigos estaban de casa rural, como nosotros no podíamos ir todo el fin de semana nos acercamos a comer con ellos el sábado. Después de comer estaba el niño de pie bebiendo agua de una botellita, mi marido sentado a medio metro del niño y yo sentada a un metro. Mi marido: “ A., el niño, esta tirando el agua al suelo”. Yo: “Cariño, el niño también es tu hijo, y estas sentado a la misma distancia de él que yo”.Jolines, y es que a veces parece que el niño es sólo mío, sobre todo cuando hay que molestarse en levantarse o hay decirle que no haga algo.