Hace unos días surgió una interesante conversación en la red social Twitter entre Enfermeras a raíz de una Tuit de la gran Nuria de Argila Fernández, una Enfermera con gran experiencia asistencial y docente que se preguntaba acerca de la evidencia en la pauta de las curas. Su tuit se fue compartiendo y empezamos a entrar a debate algunas Enfermeras y Enfermeros en la red algunos de ellos con gran experiencia y que son referentes en el tema de las curas como es el gran Luis Arantón. Me parece interesante la conversación que surgió y es por ello que quiero compartirla en esta entrada, para que veáis que las redes también sirven para intercambiar opiniones basadas en evidencias y llegar a conclusiones en común. Aprendiendo, siempre aprendiendo.
Opiniones y desarrollo de la conversación en Twitter
La conversación comenzó con el tuit de Nuria a cerca de si siguen haciendo curas con el AMMVB ( a mi me va bien) y cambios de pautas por enfermera y día, sin duda es para reflexionar y para plantear muchas cuestiones relacionadas con la evidencia, la visión crítica, el conocimiento, la formación, la actitud y sobre todo el sentido común, tal y como apuntaba en el siguiente Tuit otro gran profesional como es Antonio Sánchez. Ya por sentido común no tiene lógica ni sentido que sigan pasando a día de hoy cuestiones tan importantes como ésta y sobre todo tal y como apuntaba más adelante Luis Arantón:
“todo esfuerzo será poco mientras haya pacientes con úlceras o con heridas que curar”
En esta conversación en la que participamos inicialmente Nuria, Antonio y yo se añadió Adrián Fuentes y Luis, aportando cuestiones de bastante interés sobre todo a nivel de formación de los profesionales respecto a curas, un tema sobre el que siempre hay que estar actualizado, aplicar las últimas guías de prácticas basadas en evidencias y sobre todo unificar criterios entre las compañeras para trabajar igual en cada turno evitando aplicar el “a mi me va bien” y sin tener en cuenta las recomendaciones de expertos en la materia.
Ante este debate surgió la cuestión: ¿ hay lucha de egos? y aquí es cuando yo me acuerdo de la excelente entrada de Virginia Salinas en La Factoría Cuidando hablando acerca de este tema, la necesidad de aportar valor a los cuidados y la estrategia de no competir que tanto me ronda últimamente y que en los últimos cursos que he realizado en todos ha salido a debate este tema. Las Enfermeras trabajamos 24h durante los 365 días del año, hay turnos en los que no llegas a todo, sobre todo si se complica un paciente y requiere toda la atención, que es algo incuestionable. Si quedan cuidados de ese turno sin hacer, no pasa nada, porque entra otra enfermera para dar continuidad a esos cuidados, por lo tanto dejemos de competir y de caer en críticas, luchas de egos y otras cuestiones porque sino no avanzaremos, y seguiremos viendo 3 pautas de curas diferentes en cada turno por ese AMMVB.
El experto en el tema de curas, el gran Luis, insistía en las conversaciones que la formación es la clave, insistir en la formación, en la divulgación de guías y prácticas clínicas, aplicarlas a la práctica diaria. Y esta formación debe ser impartida desde la Universidad a todos los niveles y posteriormente la formación continuada que debería ser en todas la comunidades y organismos igual para poder trabajar todas de la misma manera, porque hay excelentes profesionales en la materia de los que todos debemos aprender.
“Utilizar el conocimiento para aportar valor…..la estrategia es no competir y encontrar aquello que genera más valor sobre todo para los ciudadanos y los pacientes”
Competimos por la tradición (el siempre se ha hecho así…y ahora no vaya a venir un/a jovencita/o a decirme cómo debo trabajar). Competimos por la eminencia mal entendida (la cura se hace cómo yo digo que soy el/la facultativo/a…a pesar de que tengas ese máster de heridas y demás). Competimos por poder (el que manda aquí soy yo y las cosas se hacen como yo digo, que en la escala jerárquica estoy por encima de ti). Competimos por “mis pacientes” o un celo profesional mal entendido (a ese paciente que no lo vea otro que es mi paciente y yo sé lo que necesita). Competimos por funciones (eso no me toca hacerlo… o no la llevo a pesar que voy al otro servicio, pero es que esa no es mi función). Competimos por conocimiento, por jerarquías, por equipos, por desconocimiento, etc. Es decir, competimos, competimos y en ocasiones no avanzamos hacia ese resultado en salud.
( Extraído del post de Virginia Salinas del que hago mención más arriba, os recomiendo leer detenidamente)
Conclusiones
- Las redes sociales te permiten intercambiar conocimiento y opiniones de temas concretos que son de gran interés para la profesión y que requieren ser tenidos muy en cuenta, plantear soluciones y llevarlas a cabo, aunque sepamos que sea duro y haya que luchar por ello
- El AMMVB tiene que desaparecer, tenemos que erradicar a ese nuestro peor enemigo: nosotros mismos y nuestros egos. Se trata de mejorar la calidad asistencial de los pacientes y mejorar los cuidados y esa es la esencia Enfermera pura y dura.
- Es responsabilidad individual el formarse adecuadamente en prácticas basadas en evidencias y aplicarlas todos por igual en la misma unidad por lo menos, unificar pautas y aplicarlas.
- Esta conversación y las opiniones son siempre en general y hablando de la manera más constructiva posible, porque el plantearnos cómo hacemos las cosas es el mejor indicativo de que queremos mejorar y aprender, insisto en lo de aprender. Se trata de aprender y de mejorar, siempre.
- Competir no es la solución: No se trata de competir por ser el que más pronto acaba la labor asistencial, no se trata de competir por dejar de hacer aquello que tenemos que hacer, sino que se trata de actuar en beneficio del paciente como miembros de un equipo asistencial. Si se actúa con desconocimiento o sin actualización del conocimiento, debe de existir la posibilidad que un integrante del equipo tenga la libertad de exponer al compañero/a de trabajo que la cuestión se debe hacer atendiendo a la evidencia para aumentar ese beneficio y disminuir los riesgos. Y reajustando actividades e intervenciones con los pacientes acordadas en común consenso profesional para evitar esa variabilidad de manera que dependiendo de las manos que actúan el resultado es diferente. ( Extraído del post de Virginia Salinas)
“Trabajar en equipo tiene un aspecto crucial, hagamos colaborativo el aprendizaje”