Convierte anécdotas en historias (Storytelling) y llega a tu público

¿Qué ha pasado qué en la oficina?

Muchas veces percibimos las anécdotas como pelusilla, simples historias de oficina que nos distraen en un largo día y luego, a volver a las tareas. Total, ¿para qué nos puede servir una anécdota?

Quizás para mucho más de lo que se cree… El uso de contenido anedótico puede volverse un pequeño arte con un poco de creatividad. Y lo que conseguimos con ello, está claro; que nos lean, más visitas, contenido viral, hacer reír a alguien, conseguir seguidores, que nos quieran un poquito más o hasta algún nuevo comprador. 

Y todo, porque estás contando algo con gancho en lo que puedes incluir -por supuesto, y por favor, de manera acorde y lógica a la historia- tu promoción, producto, regalo, etc.

Convertir anécdotas en historias (storytelling) puede hacerte llegar a tu público y quedarte con él.

Vamos a verlo mejor y más claro con un ejemplo que me llegó a mi propio correo hace poco más de una semana:

El asunto era el siguiente: “Quieren hacerme Bullying en la oficina” y el mensaje:

Fuente: Postcron

Y pasó lo siguiente:

• Mi curiosidad hizo que abriera el mensaje.
• El gancho del mensaje hizo que lo leyera entero.

¿PERO POR QUÉ?

Principalmente, porque aportan carácter real a la narración, resulta más atractivo para leer y personifica a la empresa de manera que se vuelve cercana al cliente. Muchas veces existe la idea equivocada -o sin querer- de que la profesionalidad de la empresa está ligada a una especie de “seriedad” que la vuelve un activo frío y sin corazón (especialmente si nos dedicamos a consumidores finales).

Y tú… ¿qué historias cuentas?