Revista Diario
Hace unas semanas que quería hablar de la copa menstrual. Llevaba tiempo dando vueltas a la idea de empezar a utilizar este sistema y sustituir a los tampones que me acompañan desde los 14 años, mucho tiempo ya. Me pareció un sistema cómodo, saludable, sin contraindicaciones y sencillo. Así que ni corta ni perezosa lo compré en una tienda online. Esperé a que me viniera la regla y lo probé. Pero mi primera sensación fue desagradable, ¡¡molesta!!. No soy sensiblona con la zona vaginal, ni aprensiva. La colocación es sencilla, cómoda, no es nada complicado. Como se muestra en la imagen de más arriba, se pliega y se introduce en la vagina, una vez introducido se suelta y ella sola se acopla a las paredes. Sencillo y cómodo.
Pero nada más ponerla noté roces, y me di cuenta que era el rabito que sirve para ayudar a sacarla. Lo recorté, y mejoró, aunque no del todo. Seguía notando molestias, roces. Probé a colocarla de nuevo, pero no sirvió de mucho. Salí con ella, y el sistema es práctico, sin duda, limpio. A eso no puedo poner una sola pega. Y además es barato. Todas sabemos lo que cuestan los tampones, salvaslips como complemento o las compresas.
Pero el segundo y grave problema es que al poco de ponerla, empieza a descender, hasta que se sale. No comprendo muy bien por qué ocurre esto. Y por este motivo no puedo utilizarla.
Así que convoco al consejo de sabias, mujeres blogueras que leáis esto y utilicéis la copa menstrual. ¿Estoy haciendo algo mal?, ¿por qué motivo se puede bajar?, ¿hay algún "truco" para ponerla?.
El tamaño elegido ha sido el grande, ya que he dado a luz, tal y como se indica en las instrucciones. A día de hoy no puedo utilizarla por estos motivos, y sinceramente estoy un poco decepcionada porque confiaba en que este sistema me fuera bien.
Espero vuestros comentarios y consejos.