“(…) Rosalie no dijo una palabra. Su mirada se posó en el rostro del joven dueño de unas perfectas facciones. Ya sabía quien era. - Lucifer. - Satán, rey de las tinieblas, diablo… como más lo prefieras(…)” Atada a la conocida creencia de que el demonio es malvado, Rosalie evita cualquier tema que tenga que ver con ello. Pero ¿Quién dijo que gracias a él no podríamos conocer al amor verdadero? Inesperadamente, la joven quedará relacionada con un extraño hombre que le robará el corazón, y le traerá más de un problema. Aventuras, fantasía, amor y demonios… ¿Qué más se puede pedir?
Muchas gracias a la autora por el ejemplar.
Antes que nada, quiero aclarar que este ejemplar fue cedido con la condición de crítica objetiva, a lo que del otro lado no hubo ninguna objeción. Por eso mismo esta reseña está construida desde una base total y absolutamente constructiva, sin intención de ningún daño. Espero que se pueda apreciar así :D
La historia tiene potencial, y creo que con otras 150 páginas de contexto y explicación hubiera estado diez veces mejor. Pero tiene algunos errores (que no se reducen al constante cambio entre usar el nombre del personaje y su apellido). Se divide en dos historias con diferentes personajes, pero a ambas las conectan tres cosas: los demonios, el diablo y una fiesta. Creo que, quizás, falta poner atención en algunos detalles: en la segunda historia, por ejemplo, la protagonista está en la facultad, y la fiesta de su amiga Bonnie tiene toda la pinta de ser de 15 (ella bajando con un vestido lindísimo de una escalera, el vals y toda la cosa). O la idea de comprar un regalo de cumpleaños dos meses antes sin justificación, sólo para conocer al que va a ser otro de los personajes principales. Me faltó durante la lectura una estructura más construida, con situaciones que se dan por una razón en particular.
Las escenas son cortas e inmediatas, al igual que los diálogos: no son ni pocos ni muchos, pero se cortan abruptamente y prácticamente no hay acción entre ellas. Esto hace que no terminen siendo del todo creíbles, y afecta terriblemente a la historia.
Por esta razón y por la falta de contexto general, los personajes no logran tener la profundidad que la autora intenta que tengan. Mi sensación fue saber demasiado cómo se ven: el pelo, los ojos, sus cuerpos. Sé cómo se ven desde cada ángulo, pero muy poco de su personalidad. Es un círculo: esto mismo hace que las acciones y escenas no te atrapen del todo porque no lográs conectarte con ellos, y aquello que no te convenzas de los personajes, y así.
Además hay un grave problema: los sentimientos, al igual que las escenas, se precipitan. Lo que en general todos llamamos "insta love" se sucede en esta historia, entonces el resto de la ella (los sacrificios, que dos personajes se digan "te amo" y demás) pierde verosimilitud. Así, cuando un personaje se sacrifica por otro, uno no lo cree y hasta se pregunta por qué.
A esto se le suma un tema de jerarquización: ¿por qué el mismo diablo va a luchar cuerpo a cuerpo con alguien que no es más que un demonio? Otra vez el problema de la verosimilitud, porque durante esas escenas me la pasé haciéndome esa pregunta.
Y dos temas no menores: 1) se mezclan expresiones argentinas con el neutro que se utiliza en el libro y 2) en la sinopsis se describe a Rosalie, la protagonista de la segunda historia, como alguien que evita todo lo que tiene que ver con el diablo... y la historia no cuenta nada de eso. De nuevo, faltó una contextualización y profundidad de personaje, que me hubiera encantado tener para poder disfrutar más de la historia y de los personajes.
Me encantaría poder leer algo más de la autora en el futuro con las modificaciones necesarias a su forma de escribir. No cambiar de estilo, pero sí quizás revisar el texto, contextualizar, hacer de los personajes algo interrelacionables con otros sin necesitar recurrir a la inmediatez de los sentimientos.
Fue un placer haber colaborado con ella, y ojalá pueda sacar alguna que otra constructiva y que la ayude de esta reseña :D