Por Redacción La Tinta
#NoEsRuidoEsMúsica El Sindicato de Músicos de la Provincia de Córdoba puso en marcha una campaña de visibilización sobre la derogación de la ordenanza N°11683 que habilitaba la música en vivo en lugares gastronómicos. Justo cuando el sector cultural había comenzado a reactivar sus actividades luego de la parálisis y la crisis derivada de la pandemia, la Municipalidad de Córdoba impone una restricción total a los derechos laborales de las personas músicas, empujándoles a la ilegalidad o a la pérdida del sustento diario.
Además del impacto laboral que implica la decisión del gobierno de la ciudad -muy lejos de generar políticas públicas para colaborar al fortalecimiento del sector-, es una más de las muchas medidas que en los últimos años limitan -por acción u omisión- el acceso a la cultura de las personas.
En vez de regular de manera efectiva la ordenanza anterior, asegurando que se conozca la normativa y se cumplan los parámetros de sonido establecidos, votaron en mayo una nueva ordenanza que directamente prohíbe cualquier manifestación artística en estos establecimientos. No se informó debidamente a la ciudadanía, a les dueñes de locales gastronómicos ni a la gran variedad de trabajadores que intervienen en la realización de espectáculos musicales y artísticos. Por si fuera poco, en las últimas tres semanas se han incrementado las clausuras en locales que, en muchos casos, desconocían la nueva medida.
El Sindicato de Músicos había presentado un proyecto para fortalecer el Circuito Gastronómico Cultural: proponía promover y ampliar los espacios donde se ejecuta música en vivo, intentando regular los excesos cometidos en el marco de la ordenanza anterior (principalmente controlar la presión sonora para lograr una mejor convivencia). Sin embargo, no fueron convocades cuando se la derogó, no medió diálogo alguno con las personas afectadas y tampoco se tiene, hasta ahora, una respuesta.
“Hace más de dos meses desde el Sindicato de Músicos de la Provincia de Córdoba se presentó un proyecto sobre el cual ya veníamos dialogando con sectores de Municipalidad, Cultura y Espectáculos Públicos para desarrollar el circuito cultural en los espacios gastronómicos. Este proyecto tomó de base la ordenanza recientemente derogada. Es un proyecto de desarrollo porque entendíamos que había desconocimiento y un mal uso de la ordenanza, entonces propusimos hacer un trabajo de comunicación para que las personas dueñas de locales la pudieran usar, entendiendo cuáles eran los límites, lo que se podía hacer y lo que no. Una labor integral para mejorar la aplicación de la ordenanza y también para ampliar ese circuito de laburo a un horario más temprano, fomentar los horarios de la tarde y el mediodía”, cuenta a La tinta Víctor Garay, Secretario de Hacienda del Sindicato.
“Ahí nos encontramos con la noticia de que los funcionarios en su momento de espectáculos públicos habían derogado esa ordenanza en abril, una decisión a nosotros no nos consultaron -ni al Sindicato ni a nadie del sector-. Teníamos el compromiso de avanzar en ordenar esto para que funcione, pero bueno”. Más allá de la buena predisposición de algunes funcionaries, aún no hay una respuesta efectiva. Realizaron una asamblea abierta para comenzar a visibilizar lo que está sucediendo, sobre todo ante la gran cantidad de clausuras en el marco de esta ordenanza.
“La ordenanza nueva efectivamente quita el artículo que tenía la anterior que es la que permite estas actividades culturales en los lugares gastronómicos, que además fue un artículo que peleó una asociación de músicos hace mucho tiempo porque no hay lugares donde hacer música. Desde ciertos sectores de la municipalidad dicen que lo que quieren es evitar la superposición de normativas y que todo lo que sea relacionado a arte y música pase por la ordenanza de espectáculos públicos. Nosotros estamos trabajando en lugares que no tienen habilitación para espectáculos públicos y tampoco sabemos si los lugares gastronómicos van a querer avanzar en ella porque no se sabe bien cuál es el plan. No sabemos si es algo recaudatorio o no, la cosa es que hoy los lugares en los que trabajamos son lugares gastronómicos y si se aplica la ordenanza tal cual, nos empujan a trabajar en la clandestinidad”, explica Garay.
La nueva ordenanza abre un apartado sobre el uso de parlantes en patios y la trascendencia del sonido fuera del local. Además, afecta a todos los espectáculos públicos, a todas las expresiones artísticas. “En ese contexto es que decidimos visibilizar el tema. No tenemos una respuesta y es importante informar sobre esta situación, porque ni los dueños de los lugares tienen claro cómo está funcionando y qué dice la normativa”.
Luego de la campaña de visibilización, consiguieron que se les conceda una reunión para dialogar sobre el tema con el área de fiscalización y control. Desde el Sindicato de Músicos esperan se pueda avanzar en una normativa que promueva el trabajo y que se tenga en cuenta el programa que habían presentado. “El programa que habíamos planteado tenía en cuenta que había un mal uso de la ordenanza anterior en algunos lugares gastronómicos y también mucho desconocimiento, por eso propusimos un programa de educación, de formación en este tema para mejorar el uso de esa herramienta que para nosotros era buenísima para el desarrollo cultural y laboral de la de la música en la ciudad, en el marco incluso del plan general que tienen de ciudad artístico cultural desde la Municipalidad. No entendemos por qué hicieron esta modificación de la ordenanza. Lo que faltaba era control y educación nada más, para avanzar en cumplir de mejor manera la ordenanza anterior”.