Limpiar toda la zona, desinfectar y dejar a Coronado descansando en la UVI del Refugio, con antibióticos lleva casi dos horas, pero por fin este pobre perrillo está seguro y atendido...es un perro joven y bueno...con todo su dolor y miedo, no ha hecho ni un mal gesto; atrás queda el dolor, el miedo, el hambre que ha pasado en su corta vida...ahora le toca aguantar las curas, que seguro serán dolorosas, pero saldrá adelante, es un campeón y se lo merece; seguro que en algún lugar existe la familia que lo quiera y a la que él le dé su amor y lealtad.
Esta es una de tantas historias del Refugio, de sus voluntarios, de sus trabajadores, de sus animales...
El Refugio está a más del 200% de su capacidad: lo único que pedimos es que las personas se conciencien sobre el abandono, que las protectoras no podemos asumir tantos casos de maltrato y abandono; pedimos a las administraciones que se impliquen realmente en el tema del abandono, que promuevan campañas de castración de animales y que castiguen con fuertes multas los criaderos ilegales.
Carmen Manzano
Pta. de la SPAPM
