Revista Opinión

Coronavirus y literatura

Publicado el 25 febrero 2020 por Carlosgu82

Me ha sorprendido mucho saber que en 1981 el escritor Dean Koontz publicó la novela Los ojos de la oscuridad (The eyes of the darkness) en la que habla de un virus, una poderosa arma biológica desarrollada en laboratorios situados en las afueras de la ciudad de Wuhan, en China. El virus se denomina Wuhan-400 y afecta solo a los humanos. Los hechos ocurren en el 2020. Dice La opinión de Murcia: «En ‘Los ojos de la oscuridad’ el norteamericano habla de un arma biológica que causa estragos en el planeta Tierra. Hasta ahí un tema abordado por miles de escritores, pero lo que ha sorprendido es la precisión en torno a dos asuntos que Koontz apenas menciona de pasada: el cuándo y el dónde. Y es que en la novela se hace referencia a que la pandemia fue desatada ‘en torno a 2020’ y la nombra ‘virus Wuhan-400’, al situar la ciudad china como su punto de origen».

Esto me recordó el juego de cartas Illuminati de 1982, en que aparece el ataque a las torres gemelas y al Pentágono que ocurriría en el 2001 y el libro de Morgan Robertson, Futilidad o el hundimiento del Titán, de 1898, que describe el hundimiento de un trasatlántico -que realiza su viaje inaugural entre Londres y Nueva York- debido al choque con un iceberg. La tragedia ocurre una noche de abril y hay muchas víctimas porque la nave no lleva suficientes botes salvavidas. Todo esto ocurriría realmente con el Titanic, 16 años después de publicado el libro de Robertson. En El viaje a Laput, del escritor Jonathan Swift, los astrónomos del lugar, en pleno siglo XVII conocen perfectamente los dos satélites de Marte. En Micromegas, Voltaire vuelve a describir esos satélites, que serían descubiertos mucho después, en la segunda mitad del siglo XIX. ¿Coincidencias significativas, predicciones inexplicables o conspiraciones ocultas?


Volver a la Portada de Logo Paperblog