Primera salida descalcista por el campo. Vuelta running de 20 km. por el Parque Regional del Sureste, en Madrid, bordeando la Marañosa. Ruta running preciosa para correr vayas en barefoot o calzado.
Rivas Vaciamadrid, 30 de septiembre de 2017
Tras unas vacaciones en Galicia de correr bastante por el monte, incluso con un trail para rematar las vacaciones (tengo pendiente el post) y un año ya desde que empecé a incorporar por asfalto algunos entrenamientos descalcistas. Este mes de septiembre está siendo de correr poco, solo un día en el fin de semana, pero muy de por el placer de correr. El día que salgo a correr no me lo tomo como un entrenamiento, ya pocas marcas voy a mejorar, sino como una diversión.
Así, hace un par de semanas, salí a correr un rato descalzo por las calles de Rivas, sin nada previsto y poco a poco me fui animando hasta completar una media maratón, 21 km. el 95% del recorrido por asfalto, aunque la foto que pongo sea justo cruzando un olivar.
Cruzando descalzo un olivar en Rivas, el resto fue asfalto
Aquí os dejo los tracks por si alguien quiere hacer una media maratón sin salir de Rivas: Enlace Wikiloc El fin de semana pasado, había leído que en la cercana laguna de Miralrio en Velilla de San Antonio habían visto flamencos y el sábado me levanté con la idea de ir a verlos. Me calcé mis Enix y para allá me fui, por una bonita ruta que va desde la laguna del Campillo, en paralelo al río Jarama aguas arriba, hasta Velilla. Me costó un poco, pero al final los encontré, y allí me pasé un rato hipnotizado, observándolos y haciendo fotos, aunque estaban bastante lejos.
Flamenco en laguna Miralrio en Velilla de San Antonio
Más flamenco en laguna Miralrio en Velilla de San Antonio
Los tracks de la ruta, en este enlace de Wikiloc
Hoy me ha pasado algo similar. Es sábado y, a las ocho de la mañana me he levantado con ganas de correr por el campo. Hacía mucho que no iba la zona de la Marañosa y me gusta esa zona, estás en la naturaleza, y prácticamente es un recorrido sin desniveles, pero está un poco lejos de casa, a no ser que quieras hacer de 30 km. para arriba.
Así que me he acercado en coche hasta el parking de la entrada al Soto de las Juntas y desde allí he iniciado la ruta. La novedad, era la primera vez que iba a correr descalzo por caminos de tierra. Llevaba las sandalias atadas al cinturón, por si acaso, pero la idea era ver hasta donde aguantaba. Aquí dejo el mapa de la ruta:
mapa de la ruta
Y aquí los tracks en este enlace de Wikiloc
Los primeros aproximadamente 3 km. que hay hasta La Escuela Nacional de Protección Civil se hacen bien, son de asfalto, aunque no es que sea un asfalto muy cariñoso con los pies, en algunas zonas está muy cuarteado. Al ser temprano y no estar todavía la marea de ciclistas que vienen por esta zona, todavía sorprendes a bastantes conejos que salen disparados en cuanto te acercas. Pasado el edificio de la escuela, se acaba el asfalto y empieza el camino de tierra, esta zona, con alguna piedrecilla que, de momento, los pies toleran bien.
Hay que coger un camino a la izquierda que cruza por un puente el río Manzanares, donde se aprecia algunos patos y cigüeñas en el río, y en tierra, a un lado campo de cultivo, ahora sin ningún cultivo y al otro una ganadería. La pena es que no he hecho fotos porque no se me ha ocurrido lo de escribir este post hasta la vuelta, pero hay otros post en mi blog con fotos de esta zona.
Río Manzanares desde el puente que lo cruza
De momento bien. Sobre el km 4. pasado el puente y una barrera que impide acceder a vehículos, nos encontramos de frente la Marañosa. Cojo el camino de la izquierda, que es el que más me gusta porque va por debajo de los cortados y siguiendo el curso del rio Manzanares. Los pies muy bien, sorprendido porque el suelo está muy liso, tierra dura y pocas piedrecillas, se corre bastante bien. Es una delicia, el primer kilómetro por tierra está siendo una experiencia positiva. A ver hasta donde…
Caminante no hay camino
Siempre que pasa un grupo de ciclistas se oyen las típicas frases “mira ese, descalzo!!” pero hay un chaval de un grupo que se queda retrasado a mi altura y me pregunta que por qué corro descalzo, si he hecho una promesa o algo… En fin, le digo que corro de forma natural y le doy algunas explicaciones, ya que parece interesado.
Km 5, 6, 7 esto marcha muy bien, voy a un ritmo cómodo, suave, trotón. Los pies solo sensaciones buenas, el camino está siendo muy agradable, tierra dura en algunos tramos y en otros más blanda y suelta pero apenas piedras.
Corriendo por el camino y las curiosas formas de la roca
Sobre el km 8 se pasa por una zona donde hay una casa de labranza y el camino está peor. Camino con más grava y los pies sí se resienten un poco con las piedrecillas, pero bueno, tampoco es que sea impracticable. Es una zona de medio kilómetro más o menos.
Casi todo el camino avanza entre las paredes yesosas de los Cerros de las Coverteras por la derecha y el rio Manzanares por la izquierda, unas veces más lejos, otras más cerca. En el km. 9 se llega a una parte del camino donde la pared del cerro se ha desprendido y ha taponado el camino, pero de tanto pasar senderistas y bicis, ya hay otra vez senda por encima de las rocas, no se puede pasar corriendo, hay que “escalar” un par de rocas, pero no hay problema con los pies, está muy desgastada la roca.
Sobre la roca observando la junta de los ríos
Justo después de cruzar las rocas tenemos una bonita vista de donde se unen el río Manzanares y el río Jarama. Bueno, realmente es el Manzanares el que vierte sus aguas al Jarama.
A la izquierda el Manzanares vertiendo sus aguas al Jarama
Pasando esta zona también hay más piedrecillas, pero poca cosa y bajando una cuestecilla, poco antes del km. 10, ya llegamos a la Presa del Rey, final del trayecto de hoy. Ahora toca volver sobre nuestros pasos, que habiendo llegado hasta aquí sin dificultad y con los pies perfectos creo que la vuelta va a ser mucho mejor.
Desde la caseta de vigilancia de la presa del rey
Así es, despejada ya la incertidumbre de cómo sería el camino de duro para los pies descalzos, la vuelta es mucho mejor, el ritmo más rápido y la confianza mucho mayor.
Curioso, al pasar por algunas zonas de tierra blanda, suelta y ver huellas de pies descalzos, los míos de la ida.
Poco a poco voy deshaciendo el camino, van pasando los kilómetros de vuelta, con buenas sensaciones, sin ninguna molestia, con mayor seguridad, disfrutando más. Ya me voy cruzando con más ciclistas, también algunos corredores, muchos menos, algunos miran sorprendidos, pero la verdad es que me siento fenomenal, cada vez a un ritmo mayor.
Mis pies de vuelta ya
Los kilómetros de vuelta van pasando, del 10 al 16 por camino, bastante bien, parece que ahora se notan menos las piedras, el camino está resultando bastante suave, aunque en algunas zonas si hay más piedras.
zona del camino un poco p...t...
Llegamos de nuevo al asfalto, últimos 3 kilómetros. Aunque voy algo más cansado, aprieto un poco más, ya tengo ganas de terminar. 17, 18, 19 y ahí está el coche esperándome.
La primera ruta descalcista campera no han llegado a los 20 km, han sido 19,5. Empezando por encima de 6’/k y terminando casi a 5’/k. pero el objetivo no era correr rápido o lento, era saber hasta dónde podía llegar corriendo descalzo por el campo y la verdad es que me he sorprendido a mi mismo. Han sido unos 6,5 km. de asfalto y unos 13 km de camino de tierra sorprendentemente “fácil”, al menos más de lo que yo esperaba.
Cadencia de carrera
Y los pies bastante bien, ningún ampolla ni magulladura ni nada negativo que destacar. Ya veremos mañana… pero hoy bastante bien.
Final de la ruta, pies sucios
Ahora solo queda volver a casa, una ducha y un buen desayuno, que ya hace hambre, siempre corro en ayunas. Ganas de repetir otra ruta descalcista por el campo.
Ay señor, jubílame pronto!!
Pies ya limpios y sanos