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Correr el riesgo

Publicado el 17 octubre 2016 por Braisly @BraisLY

Correr el riesgo

“Si optas por una vida segura nunca sabrás qué se siente al ganar”, Richard Branson

Hoy en día las posibilidades que tenemos a nuestro alcance son muchas, si naces en occidente, tienes la suerte de tu lado. Seas pobre o rico, o de la cada vez más menguante clase media, podrás hacer casi cualquier cosa que te plantees. ¿Pero por qué la gente se queda en el entorno en el que nace y sigue el camino establecido? No me refiero a quedarte en tu ciudad, pueblo o aldea. Me refiero al motivo por qué la gente sigue el camino guiado y pautado trazado casi sistemáticamente por la sociedad actual.

Uno de los motivos, y esto puede cambiar dependiendo de la persona y situación es el miedo a correr el riesgo.

¿Por qué hay miedo a correr el riesgo?

Hay diferentes razones que pueden pararnos en conseguir nuestros objetivos y el miedo a correr el riesgo es una de las más destacadas.

  • Enfrentarse a algo nuevo. La incertidumbre es una cosa que la gente no tolera. No se es capaz de ver de una forma extendida todas las cosas positivas que te pueden aportar. A veces sabemos que ese cambio, puede salir mal, pero aun así habremos aprendido muchas lecciones más valiosas que aunque saliese bien.
  • Comodidad. La verdad es que hoy en día pretendemos que nos lo den todo hecho, no pegar palo al agua y que papá/mamá o el señor estado nos dé una solución a nuestros problemas. Lo cierto, es que podemos esperar un consejo o una ayuda, pero no más, las castañas las tenemos que sacar nosotros del fuego y no venga un ente divino y se solucionen por arte de magia (eso no va a pasar y lo sabes).

¿Cómo correr un riesgo de forma segura?

Al final, para hacerlo tendrá que haber más elementos a favor que en contra. Para ello, a veces un análisis más profundo en el riesgo nos va a llevar a tomar mejor una decisión y a aventurarse en la incertidumbre.

Por ejemplo, vamos a estudiar el caso de que queremos cambiar de trabajo. ¿Cuáles son los posibles escenarios?

  • Que me seleccione la mejor empresa por el mejor salario del mercado.
  • Mejorar mi salario y que tenga un mejor trabajo que me satisfaga o aporte más.
  • Que solo me igualen las condiciones que el mismo trabajo pero que sea el trabajo de mi vida.
  • No conseguir que me presenten una oferta en la que mejore las condiciones que mi actual trabajo.
  • Que se enteren en mi empresa que busco trabajo y me despidan.

Todas estos posibles escenarios y alguno más que se me escapa pueden ocurrirnos en la vida real. Algunos de estos muy positivos, otros no tanto. Pero la pregunta clave es qué pasa si sucede lo peor.

Si tu empresa se entera de que buscas trabajo y te despiden. Habría varias alternativas posibles:

  • No tengo nada ahorrado y tengo una familia que mantener (mi profesión está demandada).
  • Tengo algo ahorrado y tengo una familia que mantener (mi profesión está demandada).
  • No tengo nada ahorrado y no tengo ninguna familia que mantener (mi profesión está demandada).
  • Tengo ahorrado y no tengo ninguna familia que mantener (mi profesión está demandada).

Posibles soluciones, casos detallados

En estos casos, hay que valorar la situación personal y económica. En caso de que nuestra profesión no fuese demandada habría que hacer algo porque si lo fuera, y no buscar trabajo hasta que esta lo sea, es decir, diferenciarse en el mercado y luego ya podrías cambiar de trabajo.

Para el escenario de que tienes una familia que mantener y nada ahorrado, no busques trabajo hasta ahorrar. Una vez tengas un colchón de dinero, tírate al río y encuentra algo mejor, inténtalo pero analizando tus posibilidades reales de encontrar algo mejor, si no, tienes que conseguir que tu valor en el mercado aumente (al final, todos, aunque no lo parezca somos como futbolistas, hay un mercado que se rige por la oferta y la demanda).

En los otros escenarios de que no tienes familia a la que mantener y tengas o no tengas dinero ahorrado, tienes que arriesgar más. Si no tienes ahorrado, ahorra e inténtalo! Lo peor que te puede pasar, es que te digan que no en el trabajo que quieres, pero al final lo acabarás consiguiendo (algo muy parecido a lo que buscabas).

Como veis, estas situaciones son reales, y siempre se puede estudiar el caso desde diferentes perspectivas, pero lo cierto es que en algunos casos nos compensará correr el riesgo, en otros no. Pero no vamos a tomar una decisión a la ligera, tanto para hacer una cosa o la otra. Por eso tomar un riesgo en determinados casos puede ser muy positivo, lo que nos importa es minimizar el impacto de que el riesgo ocurra!

Para acabar con el artículo un vídeo de Elon Musk (creador de Paypal, Tesla Motors, etc)

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