http://www.elmundo.es/elmundo/2010/10/05/espana/1286263414.html
Un día más hemos recibido una nueva noticia de corrupción política, otro caso más, otra mancha más en todo nuestro sistema político que cada vez se ve más empañado por personajes que olvidan el sentido primigenio de la política, que es el servicio a los demás, y ven en ella un camino para enriquecerse y aumentar su patrimonio sin mucho esfuerzo.
Caso Gürtel, caso Fabra, caso Astapa, Palma Arena, Pretoria o Malaya…son algunos de los muchos casos de corrupción donde se mezclan desde señores con bigotes a lo Alfonso XIII, señoras recauchutadas con bótox o folclóricas con ínfulas de política.
La semana pasada se inició el juicio contra los imputados por el caso Malaya, el tan famoso caso de corrupción de la costa del sol, del que formaban parte personajes muy singulares todos ellos delatados por el cutrerio y ostentacion en sus gastos de nuevos ricos, de camareros y fruteras reconvertidos en alcaldes, folcóricas, galeristas, empresarios, jueces. De cohechos, tráfico de influencias y algún concejal prófugo de la justicia, puro neorrealismo español. Todos ellos saquearon el ayuntamiento de Marbella, de forma descarada e impune, todos ellos bajo las siglas de diferentes partidos viendo así que se sea del partido que se sea, la corrupción ha sido la única religión y el dinero el único profeta de todo estos supuestos chorizos.
Este es uno de los muchos casos de corrupción que asolan la política española, pero debemos de tener en cuenta que no todos son así, no todos roban, no hay que generalizar, no se puede descalificar a la clase política por unos cuantos oportunistas que deciden apropiarse de algo que no es suyo en un momento determinado, y que aprovechan la facilidad de acceder a un cargo político para engordar sus cuentas corrientes…
La noticia que hoy nos despierta no será la última de corrupción durante el 2010 pero no podemos ser transigentes ni permisivos con este tema…Alza tu voz!