Andan los tablones de (des)información sindical aturullados de papeles sobre lo que se proyecta para las formas de "gestión clínica" que SACYL quiere implantar (borrador PDF) Sería bueno que hubiera un poco de coherencia y despejando la cortina de miedo se viese lo que hay de realidad en ello y lo que se prentende conseguir.
Desde que leo y me intereso en temas de gestión una de las constantes quejas de los administradores de la cosa pública es la falta de "transferencia de riesgo" a los clínicos; estos toman sus decisiones (según aquellos) sin 'sufrir' las consecuencias de las mismas ni tan siquiera desde el punto de vista del "coste de oportunidad" (el recurso empleado con un paciente no puede emplearse con otro). Así las cosas una importante corriente de la gestión sanitaria ha venido a idealizar esta transferencia de la responsabilidad económica de las decisiones clínicas en diversos formatos que convergen en la entiqueta "gestión clínica" para una visión más completa sobre ella os recomiendo este artículo de @Arenaskray
No se puede negar que parte de los argumentos de esta corriente son ciertos como tampoco se puede negar que aún ahora seguimos sin conocer de un modo fiable, detallado y preciso el coste de los procesos asistenciales que, se pretende, que se gestionen desde la base... pero no son los temores sobre la materialización práctica del control de costes los que ahora se agitan.
Dado que el borrador de la legislación que permitirá insertar las Unidades de gestión clínica (UGC) en los centros y servicios de la administración contiene modificaciones en la figura jurídica contractual de quienes se integren en las UGC de modo que se podrían perder la condición de estatutario, o más bien, el derecho a la reserva del puesto de origen al cabo de cierto tiempo da la sensación de que lo que se pide es una repetición del famoso gesto de Hernán Cortés y no es de extrañar... o sí en vista de que viene de un medio o sector en el que constantemente se cacarea sobre la profesionalización de la gestión pero "sin soltar prenda".
Creo que es imprescindible que para acceder a cualquier puesto de confianza y responsabilidad deba existir una formación PREVIA y normalizada y que a un gestor profesional se le ha de medir por la obtención de resultados (clínicos, docentes, económicos, de satisfacción...)... añadir a estos requisitos la pérdida del puesto de origen e, incluso, la condición de estatutario sería un buen ejemplo de compromiso y ayudaría a despejar las dudas que los profesionales que quieran pasarse a las UGC puedan tener. Eso es lo que se debería pedir, compromiso y ejemplo... si no hay nada que temer ¿porqué no dan los responsables el primer paso?.
Como colofón no puedo dejar de pensar que ese borroso borrador da carta de naturaleza a la destrucción de cualquier esperanza de crear un equipo de trabajo como tal consagrando a los médicos como únicos "líderes" de esta industria incluso aún en los entornos y circunstancias en los que la curación ya no tiene sentido y los cuidados son el centro de la actividad... aunque este aspecto os invito a comentarlo en esta entrada del blog de "gestión de enfermería".