El estudio se realizó con unas simpáticas ratas llamadas Zucker que por lo que parece sirven para muchos de los estudios de obesidad e hipertensión. Se observó que aquellas ratas o ratones que habían sido tratados con el salvado de arroz mejoraban los índices de colesterol y triglicéridos y disminuían el estado de resistencia a la insulina. Además de todo eso, el extracto previno el aumento de presión arterial y redujo el estado inflamatorio asociado a la obesidad.
Lo más curioso es que parece ser que es precisamente el salvado lo que es eliminado del arroz para su comercialización ya que éste hace que el alimento se ponga rancio. El salvado contiene un componente natural llamado Gama Orizanol cuyos beneficios entre otros son el de antioxidante y el de controlar el colesterol por lo que cobra sentido todo este experimento y el por qué las ratas mejoraban sus niveles de colesterol al ingerir salvado de arroz.