Os seré sincera, como me hubiera gustado que alguna novia lo hubiera sido. NO siempre es gratificante esto de ir a comprar el vestido. NO siempre te sientes Julia Roberts en Pretty Woman. Al menos en mi caso no fue nada así. Al contrario de algunas, salí cabreada como una mona, a grito pelado con mi madre y llorando.
No diré los nombres de las tiendas, no sea que lean mi blog ;) El primer vestido me lo probé al salir del Registro Civil, el día que entregué el “expediente matrimonial” había quedado con mi madre para hacer unos recados, en esto que pasamos por una tienda de novias a la que siempre, siempre había querido entrar. Nos paramos en el escaparate, suspiramos y aiiishsshh.. La dueña nos debió ver y nos abrió la puerta. Le conté, me enseñó el catalogo y me preguntó si tenía 5 minutos. Pues sin comerlo ni beberlo, ni estar nada preparada: ni zapatos, con mi ropa interior negra, eso sí por suerte iba depilada. Allí me encasquetó mi primer vestido de novia.
No negaré que me impresionó ver ese blanco nuclear. El vestido era bonito y la verdad que me quedaba bien, yo estaba abrumada. Me veía demasiado NOVIA. No, no soy una novia convencional, tampoco soy super extremada, pero… Se lo intenté explicar, le comenté que quizás si no fuera blanco… me puso encima uno igual de color gris “suegra” y me preguntó, ¿así te quieres ver?
Mosqueada ella, yo y mi madre que se veía a venir que la faena de encontrar mi vestido no iba ser tarea fácil. Yo veía allí colgando monerías de vestidos y ella que no me los quería dejar probar, me puso un chal que me encantó pero que no me dejó comprar si no compraba el vestido. Ya por pesada me dejó probar el vestido más feo, menos favorecedor del mundo mundial. Un dos piezas: un corset tipo “can can del oeste” pero sin varillas ni nada y una falda con volantes, medida monja (ni larga ni corta… por medio de la pantorrilla) de lino y algodón (así que caída 0) y el color arena oscurito.. fue humillante. Solo me hubiera faltado estar con toda la tribu como cuentan en su último post las Hermanas Bolena, para que me humillaran públicamente.
La semana siguiente fuimos a otras dos.. ¡nada! Fuimos por el barrio de Gracia por eso de buscar algo diferente… pero, o no me explicaba o no me querían entender. Yo venga a mirar posts de wedding planers en los que las novias llevaban vestidos ideales, pero yo nada.. recortaba, pegaba, creé dos o tres boards en Pinterest, era un desespero. Hasta contacté con un diseñador de Londres que tenia un vestido precioso,..
Visto en pinterest
Y lloré el día que fui a una tienda de novias de mi barrio, le dije que yo solo quería mirar los vestidos de invitadas y acabé con un escote corazón, un falda de tul con cancan y un velo con cola.. allí me eché a llorar, mi madre que no podía parar de reír me hizo una foto para mandarla por whatsapp a todos mis hermanos, amigos y familiares…y of course, al futuro Sr. Lataat y la mujer diciendo ¿qué emoción, verdad? El vestido es muy bonito pero… Un desespero.
Pero la vida te trae cosas inexpicables y un día en una tienda de una amiga me presentaron a una modista que esta trabajando en alta costura y que, harta del estres de las pasarelas, se ha montado su chiringuito a dos calles de mi casa. Fui, hablamos 10 minutos y en 15 ya me había hecho un esbozo de lo que podía ser mi vestido de novia. Y la clavo. Allí por fin me dio la sensación de que alguien me había escuchado. :)
De ella y del vestido lógicamente hablaré más, pero eso sí, después de la boda, que ahora está bajo secreto de sumario.
Petonets,
Lataat.
Las fotos han sido vistas aquí: Novia histerica ; el resto de fotos son de Pinerest
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure