Cosas que no son tan pequeñas

Ahora que la mayoría de niños y adolescentes han comenzado un nuevo curso escolar, es tiempo de estar atentos a sus posibles cambios de comportamiento y recordar lo duro que pudo ser para muchos adultos el intentar integrarse en un grupo de la clase, en afrontar los miedos al fracaso, las exigencias, los exámenes. Seguro que habrán escuchado aquello de que "una imagen vale más que mil palabras". En el caso del cómic que les presento aquí hoy, el valor de sus dibujos es infinito. Pequeñas cosas, de la ilustradora Mel Tregonning, editado por Nube de Tinta, es un cómic mudo, esto quiere decir que no encontrarán "bocadillos", ni líneas de texto que cuenten la historia. Son los propios dibujos los que narran el dolor de una persona pequeña, que siente ansiedad y sufre depresión. Tregonning crea personajes de grandes cabezas, como si quisiera centrar todo en ese dolor mental que no se ve, pero que llena toda la vida. Es un libro doloroso, que desata también la ternura de recordarnos las niñas y niños que fuimos.

Las "cosas pequeñas" a las que alude el título no lo son tanto. Ojalá alguien nos enseñara a detectar esos síntomas con los que los más chicos nos piden ayuda a gritos, pero que no escuchamos porque nos parecen "cosas de niños".

Por desgracia, Mel Tregonning murió muy joven y no podremos seguir disfrutando de su arte en la ilustración. Parece que a ella tampoco la escucharon, porque murió después de ser dada de alta, pese a que un médico había alertado de signos de suicidio y pedido su urgente valoración por un equipo psiquiátrico. Recuerden que el 024 es la línea de teléfono gratuito para la prevención del suicidio. Pide ayuda.