En febrero del 98, afectado por el frío de una ciudad en la que lleva pocos meses, Nacho Valcárcel llega a la conclusión de que a lo mejor debe olvidar esa posibilidad: la posibilidad de la Música. Le han llamado unos cuatro o cinco grupos, con alguno llega a reunirse y escucha su material pero cada vez que comunica que él no tiene amplificador y, lo más drástico aún, que no tiene dinero para hacerse con uno y que, seguramente, en bastante tiempo no lo tendrá, nota que el interés desaparece por completo. Días antes, aconsejado por una chica que jamás volvería a ver, recorrió algunos locales de ensayo dejando carteles ofreciéndose como guitarrista con influencias de The Cure, Porno For Pyros y/o Jane´s Adiction (no se ha atrevido a poner Pink Floyd, pensando que en esa ciudad quizá no se entienda que un tipo todavía escuche ese álbum brillante: ummagumma).
En ese momento, en un local de ensayo subterráneo, estrecho, pero bien acondicionado, tres miembros de un grupo de cuatro comprenden que es hora de buscar otro guitarrista (el que tienen se va de la ciudad) y probar otros caminos. Tienen algunas canciones preparadas y la sensación colectiva de ponerse algo más serios. A ellos les sobra un amplificador. Dos meses después llaman a un teléfono que han recogido de un cartel, al otro lado atiende un tipo con acento mezclado. Es Miguel Angel Suárez. Ese momento marca el origen de lo que muchos años después se terminará llamando Cosmonauta.
De aquel grupo lejano quedan algunas cosas, sobre todo los miembros, y quizá algún amplificador. Tres de ellos pertenecen a Cosmonauta: Miguel Ángel Suárez (voz), Nicolás Martínez (batería) y Nacho Valcárcel (guitarras). El cuarto es Isidro Matamoros (el manager). Lo de aquellos años va y viene, pero pasa. Cada uno termina buscando otra dinámica pero curiosamente nadie se desprende de la posibilidad de la música, aquella opción que, bajo el frío, Nacho llegó a pensar que podría desvanecerse. Mucho tiempo después y tras idas y venidas y un montón de proyectos y grupos que no cuajan: Miguel A. Suárez (voz) y Nacho Valcárcel (guitarra) arrancan con Cosmonauta en el año 2004 como dúo, afectados por la salida reciente de un largo proceso de hospitalización de Nacho (el proyecto tiene, por ello, una clara tendencia electrónica e intimista e incluso muy melancólica).
Las canciones tienen una clara marca existencial, como si Miguel Ángel y Nacho, de modos distintos, hubieran encontrado en el dúo una isla, un modo de sobrevivir, casi una cura; y se centran, sobre todo, en el proceso de composición y grabación. Es una época de mucha concentración, de muchas pruebas, de cierta experimentación, el modo casero de grabar les permite un cierto riesgo en el que se sienten cómodos y que les resulta cada vez más divertido. Durante dos años producen dos maquetas con 14 canciones cada una y realizan la música para una obra de teatro. Después de un tiempo de muchísimo trabajo en común, muy intenso pero sin llegar a dar demasiados conciertos deciden darse un descanso y probar con otros proyectos que tengan que ver más con los locales y con una música más directa.
A principios de 2009 Nacho y Miguel Ángel se vuelven a juntar. Esta vez con una formación de cinco miembros y con un concepto mucho más orgánico y positivo en el que se mezclan sonidos acústicos y eléctricos. Los nuevos miembros: Nicolás Martínez (batería), Luís Bedoya (guitarra) y David Palacios (bajo), aportan fuerza a la banda y se empieza a dar prioridad a los directos. En Julio de 2009 graban la primera maqueta “Confesiones de un hombre bala” con cinco temas y se presentan al concurso “Contraindicanciones” organizado por la Sala Contraclub. Son seleccionados para tocar en noviembre en la primera fase de este concurso del que terminan conquistando el primer premio en Febrero del 2010. Poco después son seleccionados como finalistas del concurso Rock is Roll que también ganan en Marzo de 2010.
En este tiempo van componiendo nuevas canciones y en junio entran al estudio Red Led a grabar su primer disco. Pero no será hasta septiembre cuando consiguen dar con el sonido que buscan gracias a la ayuda de Angel Medina con el que consiguen dar forma a 10 temas llenos de ritmos intensos, juegos de voces y letras en castellano que saldrá al mercado a principios de 2011.
Unos de los debuts que dará que hablar este año que entramos, pop melódico del bueno, si señor.
DISCOGRAFÍA
Cosmonauta (2011)