El impacto de las medidas de confinamiento por la crisis sanitaria provocada por la COVID-19 en EE.UU. pasa factura política a Trump para ser reelegido en noviembre.
Mientras el mundo se queda sin palabras para explicar o describir los desvaríos desquiciados del presidente Donald Trump cuando se trata de sus informes diarios sobre la pandemia del coronavirus que ha sacudido a Estados Unidos, se establece un nuevo récord día al día por el número de muertes en el país norteamericano.
Las cifras diarias de decesos en EE.UU. causan un malestar general por el aumento de las víctimas fatales producto de la pandemia del coronavirus. Ya son más de 55 000 los fallecidos y cerca de un millón de contagiados.
Si en algo se ponen de acuerdo los especialistas es que Estados Unidos tenía que haber tomado medidas más serias y amplias mucho antes de que lo hiciera.
Pese a las medidas destructivas del Gobierno estadounidense y la lentitud de la Casa Blanca ante la crisis generada por COVID-19, el mandatario de EE.UU. ha empezado a buscar responsables de la crisis fuera de sus fronteras. Suspendió los aportes económicos a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la acusó de ser cómplice de China en “ocultar información” sobre el brote.
Esto se refleja de cara a las elecciones presidenciales de Estados Unidos en noviembre de este año y que nos muestra que el presidente Donald Trump pierde puntos en los sondeos públicos.
De acuerdo con el sitio Real Clear Politics, en ocho encuestas recopiladas, realizadas la semana pasada, Trump pierde ante el candidato demócrata Joe Biden y sólo empata con él en el sondeo publicado por la cadena de noticias conservadora Fox News.
Al respecto, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, afirmó el domingo que los comentarios de Donald Trump, sobre el tratamiento del coronavirus en forma de inyección fueron “peligrosos” y falsos.
“El presidente ha sido irresponsable, dijo todo tipo de cosas que no eran ciertas. La gente le cree porque él es el presidente y las palabras del presidente tienen peso. Esto es peligroso”, dijo Pelosi en una entrevista con el canal MSNBC.
Asimismo, si la crisis de salud pública no se alivia y la inminente recesión golpea los bolsillos de los estadounidenses, será muy difícil que el mandatario logre lo que parecía seguro hasta hace unas semanas: quedarse en la Casa Blanca.
En Hispan TV