José Juan Rivero*
Esta semana escuchaba una entrevista radiofónica sobre el crecimiento personal, en el programa una persona se ofrecía como gurú de la felicidad, actualmente existe una tendencia a la búsqueda de la felicidad fácil, convirtiendo todo un proceso de vivencia personal, en un cúmulo de estrategias personales, sin base, que potencien nuestra vida.
Cambiar es implicarse en un proceso de crecimiento personal, para ello debemos de cuestionarnos si nuestra vida es significativa, si la hemos aprovechado. Es importante que nos encontremos a nosotros mismos, aunque ello signifique darnos de morros contra nuestra propia realidad, con nuestra propia historia, es decir, con la novela de nuestra vida.
El bienestar no se consigue solo planteándonos que tenemos que cambiar la perspectiva con respecto al significado de nuestra vida o si somos más o menos optimistas, sino que implica un esfuerzo, una actitud y una vivencia enfocada al cambio.
Aunque no hemos menos cierto, que si fomentamos las competencias para la vida, es decir, todas aquellas técnicas o herramientas que nos ayudan en este camino hacia la búsqueda de la felicidad a través del incremento de nuestro bienestar, repercutirá positivamente en nosotros. Por ejemplo está demostrado que si practicamos la risa en nuestra vida diaria, al final terminamos riendo más, lo mismo sucede con el optimismo, cambiando la interpretación de nuestra vida efectivamente aprendemos a ver nuestra realidad con esa visión positiva.
Pero en el crecimiento personal entran otros factores a tener en cuenta, entre ellos está la aceptación de nuestro pasado, conociendo la narrativa que tenemos de este. En nuestra vida nos contamos las cosas de una manera determinada, bajo un enfoque determinado y eso afecta a nuestra realidad presente, junto a la vivencia emocional asociada.
Por esa razón, es un aspecto esencial conocer esa novela que hemos escrito a lo largo de nuestra vida, así como la reinterpretación de los acontecimientos vividos, tanto a nivel cognitivo como emocional. Así posteriormente sería necesario hacer una nueva lectura de la misma, potenciando aquellos recuerdos positivos, y reinterpretando aquellas vivencias que he catalogado como negativas.
El cambio hacia la felicidad hay que provocarlo, por esa razón también es fundamental mi actitud y mi pensamiento positivos, que buscan los mejores resultados de las peores situaciones, fomentando mi proceso de crecimiento personal, convirtiéndome en actor o actriz y protagonista de mi vida. Hoy te propongo que te decidas a escribir y protagonizar tu propia vida, te ayudará a ser más feliz.
*Psicólogo y miembro de la Sociedad Española de Psicología Positiva
@jriveroperez
https://www.facebook.com/PositivahoyImagen tomada de http://3.bp.blogspot.com/_FGpzIiiNmSI/S8SWmLz4BFI/AAAAAAAAADQ/gO7m9vhDJ7M/s1600/escalera_al_cielo.jpg