VERSIÓN ANALIZADA: Wii/Ps2/Ps4
AÑO: 2006/2017
¿DE QUÉ VA? En la lejana tierra de Nippon, el antiguo Japón, la diosa loba Amaterasu y el guerrero Nagi lucharon valientemente para derrotar al terrible monstruo Orochi, una serpiente de ocho cabezas que una vez al año demandaba un sacrificio humano, y de ese modo salvaron la villa de Kamiki y todo Nippon. Pero cien años después Susanoo, el descendiente de Nagi, increídulo ante la leyenda, rompe el sello que aprisionaba a Orochi y éste vuelve a amenazar el mundo. Amaterasu despierta de nuevo, reencarnada en Shiranui, y deberá derrotar a Orochi al mismo tiempo que recupera los poderes de los dioses celestiales, todos ellos capaces de pintar el mundo para modificarlo. Su aventura sin embargo no se detendrá sólo ahí y llegará al extremo de descubrir el origen de todos los seres y hasta de los mismos dioses.
¿CÓMO SE JUEGA? Okami es un juego de aventura que se basa muchísimo en los Legend of Zelda. Las mazmorras no son tan importantes, y no se mejora al personaje por medio de experiencia obtenida con enemigos derrotados, sino por medio de puntos de adoración, lo que equivale a que a medida que el juego avanza y realizamos misiones secundarias y principales podemos mejorar un número limitado de atributos (vida, magia, monedero y poco más).
El grueso de las mejoras viene de los poderes de los dioses celestiales, que nos permiten, literalmente, usar el mundo como un lienzo. Con un botón podemos ‘pausar’ la acción, y aparece una brocha con la que, podemos realizar toda clase de modificaciones al entorno. Una línea es como un espadazo, mientras que un círculo en un árbol muerto lo resucita y en el agua crea un nenúfar que usamos como embarcación. La lista de poderes es muy larga y divertida, pudiendo crear viento, hielo, fuegos artificiales e incluso invocar a la Luna y al Sol.
¿QUÉ TAL HA ENVEJECIDO? El juego ha envejecido tan bien que incluso ha sido relanzado en una consola, la Ps4, dos generaciones posterior a aquella donde apareció por primera vez, la Ps2. El estilo gráfico es muy particular, casi un lienzo con vida propia, y por eso es atemporal, pues no se basa en la nitidez gráfica sino en el tono artístico. El juego, además, es de una longitud más que aceptable, aunque a día de hoy sin duda tendría un mapa mucho más grande y lleno de recovecos.
¿ES DIFÍCIL? El juego es bastante fácil. Hacerse el juego sin más es pan comido y es muy sencillo conseguirlo incluso sin llegar nunca a morir. Completar todos los secretos es ligeramente más complicado, pero tampoco mucho más. Sin embargo, al igual que pasa con los Legend of Zelda, la dificultad es lo de menos, pues lo importante es la inmersión y el sentido de maravilla que evoca, que es muy alto, con escenarios tan hermosos como una ciudad japonesa de la antigüedad o una torre que llega a los cielos donde, en lo alto, espera asustado el dios de los gatos a ser rescatado.
OPINIÓN FINAL: Okami es un juego de una enorme belleza que se basa en una idea extremadamente divertida y original, como es la de pintar el mundo para modificarlo con toda clase de poderes y elementos de la naturaleza. El mayor problema que tuvo en su momento fue que nadaba entre dos aguas, las de ser medio adulto medio juvenil, y eso hizo que mucha gente no se animara a jugarlo, a tal punto que fue un fracaso en ventas e incluso, en algunas versiones originales, no tuvo títulos de crédito, algo que fue una enorme injusticia para aquellos que trabajaron tan duro en este juego. La versión HD lo rescata del olvido, y esperemos que haya conseguido que más personas disfruten del que sin duda es un juego maravilloso y muy, muy creativo, casi una obra de arte en movimiento.
LO MEJOR
LO PEOR
La idea de pintar el mundo, tanto para combatir como para resolver puzles, es muy bonita y está muy bien implementada
A día de hoy el mapa del mundo se ve un poco pequeño y compuesto por pocas zonas, aunque está muy bien diseñado
Tiene unos gráficos únicos y en algunos casos impresionantes, como los pergaminos que representan a los montruos cuando aparecen por primera vez
Tiene personajes y momentos infantilizados que eran innecesarios, y la manera de hablar de todos con walla (sonidos que no son voz) resulta tediosa
Recoge todo lo mejor que tiene la saga de Zelda pero crea una experiencia nueva
El pincel no funciona todo lo bien que debería en la versión de Wii