Esta crema facial devuelve el aspecto radiante a la piel. Minimiza visiblemente la aparición de las líneas de expresión, mejora la elasticidad de la piel y la protege del efecto negativo de los radicales libres. La piel está más suave y calmada, visiblemente más firme y revitalizada y luce un aspecto radiante, suave y más bello. Devuelve a la piel todo el brillo de su juventud.
La crema está indicada para todo tipo de pieles y su función es luchar contra los primeros signos de la edad.
CONTENIDO:
La crema se presentas en un tarro de 50 ml., lo que suele ser habitual en las cremas faciales, aunque la minitalla que yo tengo trae 20 ml. de producto.INSTRUCCIONES DE USO:
Aplicare,ps la crema de día cada mañana sobre el rostro limpio, tonificado e hidratado (esencia y sérum). Se aplica efectuando movimientos circulares hacia arriba hasta que la piel la absorba completamente. MI EXPERIENCIA: Al igual que el serum facial de esta gama de Rituals, esta crema facial me ha gustado mucho, se trata de una crema muy buen, pero tiene un “pero” bastante grande para ser una crema de día, y es que no tiene protección solar, algo que me parece imprescindible en las cremas faciales de día. La crema es de color blanco, tiene una textura bastante ligera y tiene un aroma muy bueno, es el mismo olor que el serum de la gama. Gracias a su textura se extiende muy fácilmente por la piel, y algo que me ha gustado mucho de la crema es que se absorbe rápidamente por la piel, algo que está muy bien si tenemos que maquillarnos a continuación. Los resultados que se consiguen con esta crema son muy buenos, deja la piel muy bien hidratada, nada más aplicarla se ve con más luz y queda muy tersa y suave. Además la hidratación dura mucho tiempo y las líneas de expresión se ven más atenuadas. Desde luego se trata de una crema muy buena, aunque tiene el inconveniente que os he comentado antes, que no tiene protección solar.
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