Criados por la nana

Post invitado por Roxy Gonzalez

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Hace tiempo que vengo pensando en este asunto y veo con tristeza que es bastante común. Por varios años di clases en preparatoria y conocí a varios jóvenes entre 15 y 18 años que fueron criados bien por una nana o por las empleadas del servicio doméstico (aquí se les dice “la muchacha” o “la chacha”, pero no me gustan esas palabras porque generalmente se dicen en tono despectivo, peyorativo o simplemente indicando que “no son de la misma clase”).

Estos jóvenes pertenecen a la clase media alta y alta de la ciudad; es decir son de familias “de dinero”. Muchos de esos jóvenes que conocí se sentían solos y con una gran necesidad de cariño; buscaban cubrir ese vacío con la compañía de adultos – en el sentido de que buscaban en ellos un modelo paterno/materno, alguien que les hiciera sentir bien, con quien pudieran hablar y contarle sus problemas -, o bien con alcohol, cigarro y con el dinero que tenían a su disposición. Sentía una gran tristeza cuando me imaginaba su infancia… ¡Cuánta soledad! ¡Cuánto echarían de menos la presencia de sus padres! Ahora que soy mamá y voy con mi hija a parques, a fiestas infantiles, a lugares donde hay mamás y niños me doy cuenta de que hay varios niños que crecen así. Solos (aunque tengan a mamá a su lado), criados por la nana.

Cuando hablo de nana me refiero a alguien que recibe un salario por hacerse cargo de cuidar a los niños y que, en muchos casos, vive de lunes a sábado en la casa donde trabaja. Porque también hay otras personas que hacen de nanas y no se les paga; por ejemplo los abuelos. O bien, existen las guarderías (que sí reciben un pago). ¿Quiénes tienen nana? Hay familias que contratan una nana porque papá y mamá trabajan fuera de casa y, claro, alguien tiene que cuidar a los niños. Hay otras familias en donde mamá no trabaja fuera de casa pero tiene otras actividades; como voluntariado, ir al gimnasio, salir de compras, ir a tomarse un café con las amigas. ¿Está mal tener una nana? ¿Pues si no, cómo le hacemos para cumplir con todas nuestras tareas? No es nada fácil ser mamá, ama de casa, esposa y ser profesionista o emprendedora. No. No digo que sea reprochable, todos necesitamos quien cuide a los niños eventualmente. El problema es cuando se pierde el equilibrio, cuando se deja de lado la responsabilidad de ser madre.

Criar a un hijo requiere de tiempo y esfuerzo. Hay quienes lo sufren y quienes lo gozamos con todas sus altas y sus bajas, con sus alegrías y tristezas, con la satisfacción y el cansancio. He visto mamás que van con la nana a todos lados: al super, al parque, a una fiesta, a la clase de natación… y la nana se hace cargo del niño en todo momento. En el super la nana va con el niño y la mamá con el carrito de la compra; en el parque la nana carga al niño y juega con él mientras la mamá carga el carrito eléctrico a control remoto donde sube al niño y conduce mientras conversa con una amiga o su madre; en la fiesta la nana se sienta con el niño, lo lleva a ver el payaso/personaje/botarga, juega con él, lo cuida en el brincolín, lo acompaña a la piñata, le ayuda a comer el pastel y la mamá se sienta a conversar con otras mamás que llevan nana; en la clase de natación la nana va con el niño, lo lleva al vestidor, le pone el traje de baño, lo entrega al profesor, lo saca de la alberca al terminar la clase, lo baña, lo cambia y la mamá espera en el mirador o bien acompaña a la nana y se mantiene como espectadora. ¿Por qué sucede esto? ¿Para que la nana desquite su sueldo? ¿Porque para eso le pagan? ¿O porque el razonamiento es: si tengo quien lo haga para qué lo hago yo? Una vez platiqué con una nana que me contaba que ella y el bebé se la pasaban solitos todo el día. Había otras empleadas que se dedicaban a limpiar la casa y ella se dedicaba únicamente al bebé, hasta dormía con ella.

¿Cuánto tiempo pasaría ese bebé con su mamá? Tal vez haya quienes vean esto bien y normal. Yo no. Yo creo que esto es un tipo de abandono, un abandono emocional, un distanciamiento enorme entre madre e hijo, una falta de apego, un individualismo llevado al extremo donde la madre continúa su vida casi como si no tuviera hijo; y digo casi porque carga con él (y la nana) a los compromisos sociales donde está bien llevar niños pero realmente es eso “cargar con él”. Estas madres viven con sus hijos pero no conviven con ellos. No puedo evitar pensar que es algo como: amo a mi hijo y haría todo por él, pero de lejitos. Por otro lado pienso ¿cómo viven las nanas esta situación? ¿tienen vida propia? ¿tienen hijos? Si los tienen ¿se sentirán solos como los niños a los que cuidan? Y si decide irse ¿cómo lo vive el niño?

Los hijos serán niños por un periodo muy breve, tendremos el resto del tiempo para retomar nuestras actividades, para salir, para poder sentarnos tranquilamente a comer. Hace un par de años veía muy lejano el día en que asistiéramos a una reunión y poder sentarme junto a mi esposo a comer mientras mi hija jugara sin que quisiera tenerme pegada a ella… pero ese día llegó. La infancia es breve; es el momento de establecer una relación de amor y confianza, de complicidad con nuestros hijos. ¿Crees que vale la pena privarte de algunos gustos durante unos años con tal de pasar tiempo con tu hijo? Yo sí; y lo he disfrutado muchísimo.