En la sociedad en la que vivimos se acostumbra a independizar de manera prematura a nuestros hijos sin tener en cuenta que estos de manera instintiva (no podemos re-programar un sistema biológico que requiere de unas necesidades, por mucho que nuestra sociedad lo exija) buscan el vínculo paternal, el contacto y la protección de un adulto, puesto que es una necesidad plenamente biológica, durante muchísimos años esto ha sido determinante en nuestra supervivencia.
Es importante entender el significado de crianza con apego, ya que esta no significa educar sin límites. Criar con apego es respetar las necesidades básicas de nuestros hijos y entender sus ritmos y necesidades vitales.
Para muchos defensores de la crianza con apego las bases del vínculo se crean ya des del nacimiento y a veces distan mucho de los protocolos hospitalarios. La lactancia materna, el contacto piel con piel son vitales y son fuente de alimento y protección para un bebé en los primeros meses de vida. Y no solamente eso, sino que la lactancia y la proximidad también significa amor, besos, abrazos, caricias...algo talmente fundamental para un buen desarrollo emocional.
Tan importante es, también, el hecho de cargar todo lo posible con nuestros hijos, ya sea en brazos o con algún fular o mochila ergonómica para que tengan, el máximo, contacto físico y la proximidad a su referente más importante, el que le da seguridad, resguardo y amor. Hay, ya, estudios que corroboran este hecho.
El colecho también es defendido en este tipo de crianza, puesto que el hecho de compartir cama (durante miles de años el dormir hacia muy vulnerables a todos) le da al niño seguridad, tranquilidad y alimento asegurado. Un recién nacido no tiene la misma noción que nosotros de las cosas, cuando dejamos a un bebé solo, él, no es consciente de que sus padres volverán a su regazo ni siente su alimento seguro, por esta razón muchos padres piensan que sus hijos les manipulan en cuanto lo cogen de la cama, por que llora, y al ponerlo en su cama dejan de llorar. Ellos no entienden de manipulación, entienden de cosas vitales que necesitan para su supervivencia y su crecimiento emocional. En muchas culturas es totalmente normal dormir toda la familia junta.
También forma parte de la crianza con apego el hecho de educar de una forma respetuosa a los hijos, promover el tiempo de calidad junto a sus padres, que se respeten mutuamente sus necesidades emocionales de cariño, confianza, cercanía y seguridad para que desarrollen habilidades sociales, para que desarrollen conductas de protección y empatía con el resto de personas que les rodeen, sean de donde sean, o tengan la edad que tengan. La crianza con apego se mueve por el amor hacia todos.
A nivel de nuestra sociedad se suele asociar la crianza respetuosa con niños más dependientes, con problemas en la alimentación y el sueño y baja autoestima. Y nosotros nos preguntamos... ¿qué puede ocasionar de malo en un niño darle lo que vitalmente necesita, es decir todo el amor y respeto del mundo? ¿No está plenamente demostrado que los niños carentes de amor y protección son niños que a la larga tienen deficiencias a nivel de sociabilización y amor en ellos mismos? Amar y ser amados es lo más esencial en la vida de cualquier ser humano.