Hablar de crisis la humanitaria en Venezuela es extenderse por tiempo indefinido, este país sudamericano que tenia todo para ser el de mayor impluso y desarrollo de la región ha entrado en una espiral de casó de la cual es difícil salir… La corrupción se ha apoderado de cada escenario y la decadencia de la propia sociedad ha llevado a una perdida casi total de valores e integridad.
En un país donde el salario mínimo mensual no supera los 18$ es casi imposible mantener un nivel de vida adecuado, a menudo sus habitantes se van a la cama tras solo comer una sola vez al día y los mas desafortunados se ven obligados a buscar alimentos en la basura.
Es evidente la falta de control de la situación por parte del gobierno quien responsabiliza de todo esto a una guerra económica imaginaria al tiempo que derrocha recursos de la nación en lujos personales y viajes al extranjero, Maduro por su parte se enfoca en el mismo discurso estúpido y sin sentido, mientras sus lacayos se convierten en focas para aplaudirle.
La calidad de vida del venezolano se ha deteriorado al extremo de que es imposible conseguir medicamentos o alimentos sin tener que pasar por el llamado “mercado negro” donde se “revenden” productos a precios exagerados. Mientras que en las calles y negocios establecidos legalmente los precios de los bienes y productos siguen aumentando como la espuma día a día.
Es imposible sostener una familia con un salario en bolívares sin importar que tan bueno sea tu ingreso, pues a pesar de la reconversión monetaria el bolivar sigue perdiendo valor, esto a motivado a miles de jóvenes a buscar futuro en otros países dejando atrás su nación.
Por otra parte es cada vez mas frecuente ver como la delincuencia se apodera de las calles y la prostitución de los lugares nocturnos…
No se trata ya solo de una perdida de valor monetario sino también de una total crisis social y perdida de valores.
Para los que vivimos la época de bonanza de este maravilloso país solo deseamos su recuperación para poder volver a visitarlo un un futuro…