Cuando el pasado martes Boris Johnson negó categóricamente que el Reino Unido se encuentre en crisis, el primer ministro británico pretendía acallar las comparaciones entre la actual falta de suministros que sufre el país y el recuerdo de los meses de 1978 y 1979 que han pasado a la historia como el Invierno del Descontento. Si ese era su objetivo, fracasó.
Para muchos, la negativa de Johnson no hizo más que recrear la célebre entrevista que concedió Jim Callaghan, entonces primer ministro laborista, en enero de 1979. En un momento de máxima tensión social provocada por meses de huelgas y protestas, Callaghan declaró que “no creo que otras personas del mundo compartan la opinión de que hay un caos creciente”, testimonios que el diario británico The Sun transformó en el célebre titular: “¿Crisis? ¿Qué crisis?” que todavía persigue al Partido Laborista.
La actitud del Gobierno de Johnson, sumada a la crisis energética, las tensiones con respecto al brexit y la escasez de suministros, recuerdan a muchos a ese terrible invierno de 1978-79, uno de los momentos más convulsos de la historia contemporánea del Reino Unido.
Aeropuertos cerrados, hospitales llenos, cadáv...
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Nombre de usuario Contraseña Recordar cuenta Recordar contraseña“¿Crisis? ¿Qué crisis?” Los británicos temen un segundo Invierno del Descontento fue publicado en El Orden Mundial - EOM.