En un crisol de palabras
donde se cuecen los pensamientos
en esa torre de babel de la existencia
llegó un día la mirada de un silencio seguro
que aboca suspiros al precipicio del nunca
y hiere al sol que quema las entrañas;
acariciando dolidas escaleras de tiempo
con una sola palabra
de irresistible dulzura.
De Filoversando en Nod, Evohé Ediciones