Crítica | “Blood Father”

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Ficha técnica | Título: Blood Father. Director: Jean-François Richet. Guion: Peter Craig, Andrea Berloff. Reparto: Mel Gibson, Erin Moriarty, Diego Luna, Michael Parks, William H. Macy, Dale Dickey, Thomas Mann II, Miguel Sandoval. Género: Acción, Suspense. Duración: 88 minutos. Año: 2016. País: Estados Unidos. Fotografía: Robert Gantz. Música: Sven Faulconer. Productora: Why Not Productions. Distribuidora: Vértigo Films España.

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El thriller muestra la vida de John Link, antiguo delincuente y ex convicto, y cómo se ve alterada por el regreso de su hija desaparecida, que necesita la ayuda de su padre para salvarse de una mafia de traficantes de drogas que quiere acabar con ella por sus actos.

Se nota que es verano, ya que en este par de meses más “relajados” muchas películas no muy ambiciosas aprovechan el momento para arañar su parte de taquilla sin superproducciones de por medio que no dejen hueco y dinero al resto. Y una de ellas es la que nos atañe aquí, “Blood Father”, otra cinta de acción que se sostiene por un gran protagonista de otrora época.

Contando además con un director (Jean-François Richet), para muchos, desconocido, que transmite la sensación de no profundizar demasiado en asuntos de seriedad –como podría tratarse de los cárteles de droga y los secuestros de menores- para dejar al protagonista lucirse entre tiros y explosiones, labor facilitada por un guion de especialistas del género como Peter Craig (autor de la novela base aparte de guionista) y Andrea Berloff.  No es mala, pero la historia queda en algo superficial y tampoco resulta destacable dentro del propio género de acción.

Y a pesar de todo, no tiene mal reparto. Quedando por encima de cualquier nivel, Mel Gibson es quien corta y pincha en este film, y lo hace bastante bien. No puedo comparar su interpretación con otros trabajos –porque apenas he visto películas suyas, lo lamento- pero estoy casi seguro de que no se convertirá en un clásico como “Braveheart” y “Mad Max”. La otra mitad principal del protagonismo recae en la joven hija Lydia (Erin Moriarty) que, la verdad, me dejó bastante frío. No vi un mal papel, pero me costaba creerme algunos de sus momentos. Pero la actriz de 22 años acaba de empezar a tener verdaderas oportunidades de peso, así que hay que darle el voto de confianza. Los secundarios, poco relevantes (incluso el antagonista), pero tampoco algo horrible. Destacar quizá destacan Kirby (William H. Macy) y el Predicador (Michael Parks). En definitiva es de esas películas de poco rato viendo alguna vieja gloria dándolo todo en un rollo molón.

Como detalle curioso que me pasó por la cabeza, el look de Mel Gibson en esta película sí me pareció acertado. Que se deje barba a partir de ahora, que resulta creíble e intimidador, aunque sea sin armas en sus próximos proyectos.

De “Blood Father” en sí, poco más os puedo decir sin entrar a destripar el argumento. Hora y media de intensidad y algún que otro momento semicómico, que pueden daros un rato agradable y más si sois fan del protagonista. Mi resumen de sensaciones sería Mel Gibson haciendo de Liam Neeson en la saga “Venganza” y disparos a diestro y siniestro. Si tienes el día, bien. Normalmente soy generoso con las notas, así que va a extrañar que hoy de solo un 5’5/10, pero eso no quiere decir que me parezca poco más que suficiente, simplemente que es una película que cumple con su cometido y ya. Puede que a vosotros os encante, u os parezca aburrida a pesar de ser corta. A mí me dejó normal, así que la recomiendo para todo aquél que sepa a lo que va. Y si no, cuando la den algún fin de semana, acordaos de mí y miradla desde el sofá de casa muy disfrutablemente.

Crítica: Dani Pereira