Jon Favreau es uno de los directores más sobrevalorados de la actualidad. Y todo porque con “Ironman” le sonó la flauta. A cambio nos martirizó con su infumable segunda parte (menudo rollazo) y antes de éstas, con “Zathura” y “Elf”. Ahora llega de nuevo a nuestras pantallas con ”Cowboys y Aliens”, una película cuya definición y sinopsis se encuentran en el título, así tal cual. Porque no hay mucho más que rascar.
La película comienza bastante bien, con Jake Lonergan (Daniel Craig) despertando en medio del campo y enfrentándose a un grupo de rateros al más puro estilo James Bond (Rodando escenas de lucha física es uno de los mejores junto a Statham). Lleva un extraño brazalete que será la clave (es un decir) para descubrir el misterio alienígena. A partir de aquí “Cowboys y Aliens” pasa de ser un western aceptable a convertirse en una película entretenida pero totalmente ridícula en lo que a guión se refiere. Es demasiado simple y desde luego el género está demasiado trillado como para no intentar aportar algo mínimamente imaginativo…
El reparto está plagado de estrellas y caras conocidas sí, pero algunas no funcionan en la película por muy buenos actores que sean. Es el caso de Sam Rockwell, que no pega ni con cola entre la ambientación western, no sé si será porque aún le veo en la luna (“Moon”). Hay que aplaudir a Daniel Craig porque desde luego ganas le pone. Teniendo un guión tan pésimo es dificil aguantar el tipo y él lo hace. Yo creo que es imposible que nos cansemos de verlo en sus papeles chulescos. Es genial. Igual que Harrison Ford aunque la personalidad de su personaje no tiene mucho sentido. Pasa de ser un villano a un cacho de pan sin darnos apenas cuenta. Por otro lado tenemos a Olivia Wilde, que parece tener un palo insertado en el recto durante toda la película. Luego entendemos el porqué de esta actitud pero vamos que aún así no llega a empatizar con el espectador y la química con sus compañeros de reparto es inexistente. Es super monísima de la muerte (XD) pero como actriz no es que sea especialmente brillante… Una Summer Glau 2.0 (de hecho se parecen bastante).
Los efectos están bastante conseguidos pero es normal teniendo un presupuesto de 160 millones de dólares. Los hermanos Strause consiguieron un resultado mucho mejor en “Skyline” con tan sólo 10 (la peli es una basura pero hay que reconocer que visualmente es espectacular). Los aliens son demasiado típicos, nada que no hayamos visto anteriormente y el diseño de producción no está mal pero también se queda lejos de dejarnos con la boca abierta.
La fotografía es otro aspecto que hace aguas se mire por donde se mire. Aparte de que no está muy conseguido ese toque western tan característico, hay un par de cosas que chocan y cuando en una película te da por pensar en la fotografía (o en el score) es que algo falla. Por ejemplo, ¿a qué viene utilizar en una escena cualquiera la misma sobre-exposición que en los flashbacks? Y además pasando a fotografía normal antes de acabar la misma siquiera. Incomprensible…
Conclusión: “Cowboys y Aliens” es un blockbuster fallido. Tanto en taquilla, donde no ha recuperado presupuesto ni por asomo, como en todo lo demás. El guión es una bazofia y hace que básicamente nos dé exactamente igual lo que les pase a los protagonistas. En general no es una película terrible pero sí que está a años luz de lo que debería ser y lo que prometía. Vamos que no merece la pena pagar por ella con lo caro que está el cine. Típica película de sábado por la tarde con siesta de por medio tirado en el sofá. Sin más.
Nota: Ahora que Jon Favreau ha dejado la franquicia Iron Man, ¿Podemos esperar una tercera parte con acción, humor y esas cosas que deben tener los blockbusters? La esperanza es lo último que se pierde…
Nota: 3,7