Revista Comunicación

Crítica de "La punta del iceberg", dirigida por David Cánovas

Publicado el 19 abril 2016 por Coverset @Cover_Set
ARTÍCULO POR ENRIQUE LÁZARO
EXTORSIÓN LABORAL SUICIDA 
Título: La Punta del Iceberg. Director: David Cánovas. Intérpretes: Maribel Verdú, Fernando Cayó, Bárbara Goenaga, Álex García, Carmelo Gómez, Ginés García Millán, Nieve De Medina, Jesús Castejón, Jorge Calvo. Genero: Drama Laboral. Nacionalidad: España 2016. Distribuidora: Tornasol Films. Fecha de estreno: 29/04/2016. Nota:3/5

Sinopsis: Una empresa multinacional se ve sacudida por el suicidio de tres de sus empleados en apenas cinco meses. Desde la sede central, la compañía envía a una directiva Sofía Cuevas (Maribel Verdu), para llevar a cabo una  investigación que trate de aclarar lo sucedido. En sus encuentros con los trabajadores se percibe  un ambiente cargado de presión, sin la menor consideración por los intereses personales de cada  uno, porque se concede prioridad absoluta a los resultados.
Basada en el texto teatral del dramaturgo Antonio Tabares, que se represento en el Teatro La Abadía, supone el debut en la dirección cinematográfica de David Cánovas, con amplia y galardonada experiencia en el cortometraje.
Una trama que puede recordar al El Método, que a su vez adaptaba otra obra llevada a los escenarios El Método Grönholm, en la que quizás se notaba más el espíritu teatral de la obra.
En La Punta del Iceberg el contexto es más cinematográfico, tanto en exteriores, actuaciones y planos pausados. Cuesta pensar si el drama laboral que plantea la historia, es más  realista llevada a las tablas, que en este medio que se plantea más como un thriller.
Con protagonismo absoluto de Maribel Verdú (en la obra de teatro era Nieve De Medina, que aquí hace un pequeño papel), la actriz logra una actuación convincente en el que su personaje busca una integridad personal con las que limpiar su propia honestidad.
Secundarios bien presentados como el de Carmelo Gómez y Álex García, nos introducen en un mundo de extorsión laboral, con la que el espectador se sentira identificado.
En definitiva, tiene una trama potente, que pienso tiene más fuerza como estaba planteada en el teatro, pero aún así no deja indiferente, aunque el desenlace sea complaciente para el espectador.

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