Crítica | “Eliminado”, venganzas desde la red

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Ficha técnica | Título original: Unfriended. Director: Levan Gabriadze. Guión: Cal Barnes, Matthew Bohrer, Courtney Halverson, Shelley Hennig. Género: Terror, Thriller. Duración: 82 minutos. Año: 2014. País: EE.UU.. Fotografía: Adam Sidman. Música: Nelson Greaves. Productora: Universal Pictures. Distribuidora: Universal Pictures.

Skype, Facebook, Ichat, Messenger o YouTube han cambiado nuestra forma de comunicarnos desde hace más de una década. Ahora todo está conectado con toda nuestra información en la red. ¿Qué pasaría cuando en una videoconferencia cotidiana entre unos amigos se cuela un visitante anónimo que les hace recordar el suicidio de una compañera suya a causa de “cyberbullying” y a través de estas formas de comunicación vamos conociendo la historia?

Así empieza este nuevo ejemplo del género  de terror que busca hacer algo diferente, aunque sea más en la forma que en el propio contenido en sí.

Una de las cosas curiosas de la película es que el director la ha planteado como una especie de plano secuencia falso donde la cámara en todo momento nos hace partícipe del escritorio del ordenador de una de las chicas de la videoconferencia, haciendo que el espectador se sitúe siempre desde su punto de vista.

¿Funciona como película de terror este enfoque? Sí y no. Por un lado la tensión de la situación está todo el rato presente gracias a un guión que, sin ser ninguna maravilla, es capaz de crear un ambiente y unas situaciones bastante angustiosas. Planificar un film como una conversación al mismo tiempo entre varias personas a través de Skype tiene el gran problema que cuando va creciendo la tensión también va aumentando la irritación que estos producen en el espectador. Puede ser que sea un recurso para crear la tensión suficiente pero también puede acabar cansando.

Por otro lado el gran punto negativo es la previsibilidad con el que suceden los asesinatos. Utilizar cuentas atrás o pantallas de carga en estos momentos claves son elementos que crean suspense y ganas de ver lo que sucederá después, pero también quitan cualquier atisbo de sorpresa o momentos inesperados a los que podría haber aspirado esta cinta. Está claro que es una decisión artística que han tomado los responsables de la película, pero es algo que la hace demasiado previsible.

“Eliminado” intenta afrontar una situación ya vista en este tipo de género pero con un acercamiento más moderno y novedoso, aunque el año pasado ya vimos algo parecido en “Open Windows” de Nacho Vigalondo. Uno tiene la sensación que si el director y guionista hubieran sido más ambiciosos a la hora de crear ciertas situaciones podríamos haber estado ante una de esas películas de terror que marcan un año, pero al final tan sólo se queda en un ejercicio curioso y entretenido.

Crítica: Nacho Lapuente