Crítica into the wild (2007) . por nahuel avendaño

Sinopsis: A comienzos de los años noventa, el joven e idealista Christopher McCandless (Emile Hirsch) abandona su vida en la civilización, se cambia de nombre por el de Alexander Supertramp, deja sus posesiones y dona sus 24.000 dólares de ahorros a la caridad para poner rumbo a la salvaje Alaska, donde espera encontrarse con la verdadera naturaleza y con la verdad de su existencia. Basada en el best-seller de Jon Krakauer, que con su libro -basado en las notas del diario que el joven escribió en sus viajes- inmortalizó la historia de McCandless.
Sean Penn nos trae una película que por varios motivos, tanto estéticos como conceptuales, se transformó rápidamente en película ¨de culto¨, sin exagerar.
La propuesta resulta atractiva desde un primer momento, ya que usamos al protagonista como medio para viajar a nuestros mas preciados deseos de libertad y contacto con la naturaleza, pero hay ciertos puntos que hasta encontré contradictorios. Por empezar, no puedo dejar de pensar que darse el lujo de dejar atrás una vida de comodidad para adentrarse en la supervivencia sólo puede ser accesible a gente de un nivel social medio/alto, ya que hay gente con otras aspiraciones mas urgentes en su vida cotidiana, sin entrar en clasicismos: porque hasta las actitudes del protagonista hacen suponer que se trata de un simple adolescente caprichoso que busca ir en contra de los valores algo conservadores de sus padres. A fin de cuentas, no puede dejar de ser reconocible la aventura de vivir el día a día en la intemperie.
Donde noté que mas flojeaba el guión era en la construcción de los personajes. Por momentos, Alex Supertramp parecía ser una suerte de ¨Mesias¨ que cada vez que abría la boca comunicaba principios a seguir por quienes quieran librarse de la sociedad de consumo, sumado a muchos monólogos innecesarios y hasta ridículos, pero como actuación, por parte de Emile Hirsch, quedé satisfecho, ademas del parecido físico con la persona a quién representaba. Quizás el momento de mayor intensidad tanto en desempeño actoral como emocional sea el tramo que comparte con Hal Holbrook, haciendo de un anciano que le proporciona una mano en su viaje: escenas realmente emotivas.
Algunas películas que basan la mayor parte de su duración mostrando escenas de paisajes parecen quedar ¨de relleno¨, este no es el caso, ya que nunca se hacen monótonas, y gracias a una buena fotografía, las locaciones toman un papel importantisimo para el desarrollo de la historia.
En cuanto a la banda sonora, un punto aclamado por los fanáticos de la película, creo que este aspecto corre por cuenta propia: en lo personal no me pareció nada del otro mundo y me fue indiferente en los momentos que la música acompañaba.
Into the wild es un titulo muy interesante del que se pueden rescatar cosas positivas y algunas otras que pueden ser cuestionadas, pero esta mas que seguro que al final de verla, nos hará replantearnos algunas cosas.
Puntuación: