Revista Cine
Título original: Jack the Giant Slayer Director: Bryan Singer Guionista: Christopher McQuarrie, Mark Bomback, Darren Lemke, Dan Studney (Fábula: Hans Christian Andersen) Música: John Ottman Fotografía: Newton Thomas Sigel Interpretes: Nicholas Hoult, Ewan McGregor, Bill Nighy, Ian McShane, Stanley Tucci, Eddie Marsan, Warwick Davis, Eleanor Tomlinson, John Kassir Fecha de estreno: 15 de marzo de 2013
En Blancanieves y la leyenda del cazador nos ofrecían a una protagonista guerrera que enfundada en una armadura luchaba contra su madrastra para recuperar el poder, hace poco Hansel y Gretel dejaban de ser unos niños abandonados para convertirse en unos cazarecompensas de lo paranormal en una historia frívola y que no se tomaba demasiado en serio y ahora toca el turno a Jack, el famoso niño que cambiaba una vaca por unas habichuelas mágicas aunque aquí la historia cambia y la adaptan a las necesidades del guionista. No se entiende muy bien por qué ahora se hacen tantas revisiones de cuentos porque ya no sólo en el cine, en televisión tenemos dos series como Once upon a time o Grim en donde también se hacen revisiones de las historias infantiles, cuentos nada ingenuos que contaban los padres a sus hijos para que aprendieran una serie de normas, como la de respetar a la familia, desconfiar de los extraños… Ahora lo que se busca es crear una historia en donde la parte moral desaparece para simplemente entretener durante un par de horas mediante una historia más o menos coherente, unos personajes carismáticos y unos efectos visuales más o menos conseguidos, y por supuesto en 3D que dará algún que otro susto con todas las piedras, flechas y armas que lanzan a la pantalla.
Con un prólogo un tanto extraño hecho en animación, nos cuenta una historia sobre unos monjes que intentando alcanzar a dios crearon unas habichuelas mágicas. Pero a donde les llevó no fue al reino de los cielos sino a una tierra habitada por gigantes que atacaron a los hombres pero que mediante una corona mágica consiguieron vencerlos y devolverlos a su tierra. El rey que los venció fue enterrado con la corona capaz de vencer a los gigantes y las habichuelas que quedaron con las que crear un camino para llegar a la tierra de los gigantes. El resto es un sinsentido de luchas, intrigas y traiciones que termina con un epílogo que no se entiende muy bien. Resulta entretenida aunque las expectativas no deben de ser muy altas. Los personajes no son demasiado interesantes, ni el protagonista es demasiado carismático y los malos son bastante de chiste, porque acaban siendo demasiado torpes. El personaje que podría llamar un poco la atención es el interpretado por Ewan McGregor pero tampoco. Al final todo queda en un pasatiempo insulso para pasar el rato.
El director es Bryan Singer, director irregular donde los haya capaz de hacer películas tan interesantes como Sospechosos habituales, su segunda película como director, las dos primeras películas de la saga X-Men, o la imprescindible Valkiria, en donde se contaba el frustrado asesinato de Hitler; pero también un bodrio de grandes dimensiones como Superman returns. En esta ocasión se nota que flojea pero por lo menos no aburre y si nuestras expectativas no son muy exigente hasta podemos entretenernos un rato.