Crítica | “La Gran Enfermedad del Amor”, pequeña e íntima gran sorpresa

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Ficha técnica | Título: The Big Sick. Director: Michael Showalter. Guión: Kumail Nanjiani, Emily V. Gordon. Reparto: Kumail Nanjiani, Zoe Kazan, Holly Hunter, Ray Romano, Anupam Kher. Género: Drama, Comedia, Romance. Duración: 120 minutos. Año: 2017. País: EE. UU. Fotografía: Brian Burgoyne. Música: Michael Andrews. Productora: Apatow Productions, FilmNation Entertainment, Story Ink.  Distribuidora: Caramel Films España.

Después de una repentina primera cita, todo indica que entre Kumail (Kumail Nanjiani) y Emily (Zoe Kazan) solo va a quedar el recuerdo de una noche. Pero la relación entre ambos empieza a avanzar, a pesar de sus diferencias culturales, pues la familia de él es muy tradicional y busca para su hijo un matrimonio concertado. En un giro del destino, cuando se están tomando un descanso debido a tanta presión, Emily cae en un coma inducido víctima de una extraña enfermedad. Es entonces cuando Kumail decide permanecer a su lado, esperando a que despierte, y será cuando todo empiece a transcurrir para bien o para mal.

Quizá uno de los géneros del cine que enfrenta mayor dificultad hoy en día, es la comedia romántica. Por muchos motivos. Se podría decir que está muy trillado, porque al ser “fácil” de producir, las productoras de cine suelen hacer muchísimas pelis que encajan en este perfil cada año. Además, arrastra consigo unos clichés y prejuicios (algunos de forma bastante justificada) que cada vez castigan el posible interés que causen producciones de este estilo. Y varias cosas más que todos tenéis en mente y no hace falta que perdamos el tiempo.

A lo que voy es que, aun con todo, evidentemente salen cintas buenas de vez en cuando. Como en cualquier otro género. Faltaría más. Pero –al menos a mí– te sorprende de tanto en tanto algún film que a priori parece cumplir el patrón negativo que acarrean las comedias románticas y resulta ser una buena películas.

Pues es el caso de “La Gran Enfermedad del Amor”. Solo había visto el tráiler y no conocía ni director ni reparto. Y, lamento haber caído en lo típico, esperaba más bien poco de un proyecto así. Grata sorpresa la que me he llevado.

Michael Showalter a los mandos, la dirección queda comandada por un veterano actor, guionista y director del mundo de la comedia. Aunque no tiene el típico exitazo que todos conocemos, tiene carrera y es solvente en este tipo de registro. Pero si hay un nombre (más bien dos) a destacar en esta cinta es: Kumail Nanjiani. Y Emily V. Gordon. El matrimonio se encarga de guionizar la película que cuenta su propia historia, así que podríamos decir que estamos ante un biopic adornado. Pero es que además de guionistas, son productores. Y Kumail actúa como protagonista haciendo de sí mismo. Qué apañaos ellos, eh.

Kumail está en su salsa, imagino que hacer de ti mismo ayuda. Pero resulta convincente y es un personaje muy válido, consigue exactamente el efecto que se propone. Acompañado por una fantástica Zoe Kazan en el papel de Emily, la pareja principal da forma a todo aquello que acaba gustándote de la cinta. Cantidad de secundarios muy funcionales y que acaban de dar esa pincelada para que el humor de la película sea fabuloso, tales como Holly Hunter (Beth), Ray Romano (Terry), Anupam Kher (Azmat) o Zenobia Schroff (Sharmeen).

Sin entrar en spoilers, considero que esta pequeña historia aborda sus tres principales campos de forma muy acertada y por eso la sorpresa es tan grata. El drama conseguido a través de Emily y su historia. El romanticismo con todo aquello que vemos de Kumail y Emily e incluso entre los padres de Emily de forma secundaria. Y la comedia con una gran cantidad de chascarrillos, chistes, gags y gestos con bastante precisión y acierto en tono y timing para que el humor sea el clic definitivo en nuestra cabeza y ver positivamente el resultado. No voy a entrar esta vez en fotografía, banda sonora, etc. porque ni creo que sea muy importante ni en la propia producción les importa demasiado.

Se centra todo tanto en ser pequeño e íntimo, en jugar bien sus cartas a través de interpretaciones más que notables, un elocuente y acertado toque humorístico y en meterte de lleno en su historia que nada más te importa. Y me parece una brillante estrategia porque así el sabor de boca que te llevas a casa es el de haber comido muy bien en un restaurante de precios asequibles. La falta de ambición juega a su favor y lo que quizá sería un fracaso o algo a criticar en muchas otras películas, aquí constituye el gran éxito de “La Gran Enfermedad del Amor”.

Se estrena mañana, viernes 3 de noviembre, en la mayoría de cines. En muchas ocasiones habréis pagado por ver ese film del que todos hablan y salís super decepcionados de la sala. Pues esta vez, hacedme caso e id sobre seguro sabiendo lo que os encontraréis. No os cambiará la vida, no es la mejor comedia del año ni la peor peli de la historia. Pero son un par de horas bien ricas que pasaréis agradablemente con sus altibajos emocionales y su pertinente carcajada para subir los ánimos.

Crítica: Dani Pereira