Crítica: Resucitado (Risen) de Kevin Reynolds

Era habitual hace años que cuando llegaba la semana santa las pantallas de cine y de televisión se llenaran de películas de corte cristiano. Este año tenemos con El resucitado (Risen) la pequeña aportación al género. Algunas de estas películas han sido rodadas en españa y utilizaron actores de aquí para personajes importantes. Una gran superproducción como es Rey de reyes  de Nicholas Ray (director de Rebelde sin causa o Johnny Guitar) se rodó en Chinchón y tuvo a Carmen Sevilla en el papel de Maria Magdalena. Esta película también ha tenido parte de su rodaje en España, en concreto en Almería y entre el reparto también contamos con actores españoles que se mezclan con actores ingleses y americanos. El único papel importante que tiene una de nuestras actrices es Maria Botto que encarna a María magdalena, la única seguidora mujer que dicen que tuvo Cristo. Es curioso ver compartir escena a actores como  Tom Felton (Draco Malfoy en la saga de Harry Potter) o Joseph Fiennes con María Botto, Luis Callejo, Tomas Pozzi o Jan Cornet. 

La historia que cuenta El resucitado es el momento en el que Cristo es condenado a muerte y crucificado y la búsqueda por parte de un general romano del cuerpo de Cristo. Prometió superar la muerte resucitando al tercer día después de morir como adelanto a lo que pasará con todos poco antes del juicio final. De este modo demostraría que no se trataba tan solo de un hombre sino de una de las representaciones de Dios, el Dios hijo que nos salvaría a todos de nuestros pecados. A nadie le interesaba que se divulgara la historia de que JesuCristo volviera de entre los muertos, ni los romanos ni tampoco los sacerdotes de los templos judíos. Ya que no consiguen que los seguidores roben el cadáver se le encomienda a Clavius, personaje interpretado por Joseph Fiennes que los encuentre y que recupere el cuerpo del mesías. Hará un viaje físico y emocional que le llevará a dudar de todo lo que creía hasta ahora. En un tema como la religión es complicado hacer un discurso que no suponga una posición partidista y en este caso El resucitado lo cumple a medias. La mirada del protagonista es la nuestra y frente a una incredulidad inicial y una posición neutra en la que va buscando al hombre, su búsqueda le va llevando al Dios. El director toma claramente una posición a favor de la doctrina cristiana ortodoxa aunque sí que es cierto que no nos presenta a Maria Magdalena como una prostituta o una pecador sino como una seguidora más y eso es de agradecer. La resurrección de Jesucristo no es un tema secundario dentro de la religión cristiana. Que él sea el mesías y que haya superado a la muerte es la base de esta religión, si se encontrara el cuerpo y se descubriera que era tan solo un hombre los cimientos en los que se basa la religión cristiana se vendrían abajo inmediatamente y quedaría reducida a una secta judía. En definitiva, El resucitado es una película curiosa propia de estas fechas y para nostálgicos del cine de romanos. Por cierto, el director de esta película es Kevin Reynolds que tiene el dudoso mérito de hundir la carrera de Kevin Costner con Waterworld.