Revista Infancia

Críticas constructivas.

Por Anaperezllinares
Críticas constructivas.
En relación a mi post de hace un par de días (podeis verlo pinchando aquí) surgieron algunos comentarios que me hicieron pensar un poquito acerca de mi misma y de mis actitudes. Y me ha hecho pensar porque uno de ellos viene de alguien a quien conozco, aprecio y sé que lo hace con la única intención de ayudarme a mejorar como persona.
Por si no los habéis leido, los comentarios giraban en torno a que tengo por costumbre hacer post criticando situaciones puntuales de personas puntuales y a que me siento constantemente atacada sin motivo aparente.
En primer lugar, quiero agradecer a Marta su honestidad al darme su punto de vista (y a todo el que lo hace, pero parece que cuando conoces en persona al otro, cuesta un poquito más, por eso lo agradezco especialmente).
Y en segundo lugar, quiero contaros lo que se me ha pasado por la cabeza en relación a esto:
En efecto, tengo mucha tendencia a emitir críticas a traves del blog y he estado dándole vueltas para ver de donde surge esta necesidad y creo que he encontrado uno de los puntos clave.
Creo que, en mi día a día, en mis relaciones, no sé hacer respetar mi parcela, mis ideas, mi intimidad. Aunque creais que soy exagerada, mi entorno se mete mucho con mi manera de criar a David, siempre tienen una palabra negativa, un gesto de desaprobación, una pregunta dañina. Y cuando eso pasa me siento muy mal , pero no soy capaz de responder y zanjar la situación como merece...temo pasarme de la ralla y ofender a nadie, o a que se genere una discursión demasiado acalorada.  Y esta situación se repite, una vez tras otra...siempre las mismas personas que, a diario, me hacen los mismos comentarios, no se si buscando un enfrentamiento o buscando sentirse superiores al ver que no me enfrento a ellas.
Esta situación me genera mucha ansiedad y en el blog he encontrado una válvula de escape. Aquí dejo salir toda la tensión acumulada, toda la rabia que me produce no ser capaz de actuar como me gustaría y surgen esos post de enfado e indignación. Indignación producida no solo por los demás y sus actitudes, sino también surgida de un profundo enfado conmigo misma.
Y sé que esto no me justifica...no lo pretendo. Lo que pretendo es que me conozcais un poquito más, con mis luces y tooodas mis sombras, y de paso conocerme a mi misma, entenderme y tratar de mejorar.
En un post hablé de que en la mayoría de las ocasiones, cuando nos mostramos enfadados con los demás, cuando algo nos ofende especialmente, lo que se pone de manifiesto no es más que un enfado con nosotros mismos, una situación no resuelta, un conflicto interno. Y yo creo que ahí esta la clave...a veces doy más importancia de la que tiene a ciertas cosas porque sacan a relucir temas que no tengo resueltos o que no he resuelto como me gustaría.
Como ya he dicho, no se trata de justificarme ni de buscar una explicación para seguir adelante, sin cambiar nada, haciendo las cosas de la misma manera. Se trata de ofrecerme a mi misma una explicación que me haga comprender el porqué de determinadas actitudes y tratar de superarlas. 
Por otro lado también os pido paciencia...ser consciente de que algo no es como a uno le gustaría es el primer paso, pero cambiar no es fácil, requiere tiempo y esfuerzo. Y lo que no voy a hacer es ser hipócrita ni falsa con vosotr@s y hacer ver que todo es buen rollo, mientras por dentro sienta la necesidad de hacer posts como los que a veces hago. Se trata de cambiar, no de disimular ni de engañar. Se trata de aprender a canalizar esa frustración que me producen ciertas cosas en mi día a día de una manera más constructiva y menos dañina. He cambiado muchas cosas a lo largo de estos últimos años y esta no se me va a resistir.
Otra cosa que quiero contaros es que, cuando hago uno de estos posts de desahogo contra alguien es por que, por norma general, esa persona me ha estado "fastidiando" con insistencia, no es algo frío y que surja de repente. De hecho, quienes me rodean dicen que tengo muchísima paciencia en estos casos. 
En fin, que no es fácil estar a la altura de las circunstancias y que el camino para ser la persona que quiero llegar a ser es muy largo. 
Gracias a quienes me ayudais cada día a conocerme un poquito más y ser más crítica conmigo misma.

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