Raúl Arévalo y Javier Gutiérrez investigan una desaparición en un paisaje inhóspito
'La isla mínima'
2014. España.
Dirección: Alberto Rodríguez
Guión: Alberto Rodríguez y Rafael Cobos
Reparto: Javier Gutiérrez, Raúl Arévalo, Jesús Castro, Nerea Barros, Antonio de la Torre y Manolo Solo.
'La isla mínima' te atrapa desde sus bellísimos planos iniciales y no te suelta hasta que aparecen en pantalla los títulos de crédito finales. De principio a fin, te mantiene en tensión mientras va desvelando pieza a pieza el misterio que rodea la desaparición de las hermanas Carmen y Ángela. En ese pueblo de las marismas del Guadalquivir a donde se trasladan los policías responsables del caso para investigar el suceso, nadie es quien parece ser y todos tienen sus secretos.
Así que no será fácil para Juan y Pedro descubrir qué es lo que les sucedió a las hermanas. Mucho menos cuando sus pasados en el reciente régimen franquista, el de uno apoyando la represión del sistema y el del otro gritando por la democracia, choquen en un año, 1980, en el que aún faltan por limar muchas asperezas.
Javier Gutiérrez es Juan, el policía de la vieja escuela; y Raúl Arévalo es Pedro, el que quiere cambiar las cosas
La atmósfera es el tercer personaje
Si aún no te he convencido con esta breve sinopsis y la promesa de que 'La isla mínima', como los buenos thrillers, apenas te dejará respirar hasta que llegues al final, aquí van un par de razones más de por qué el segundo largometraje de Alberto Rodríguez es una joya del cine español reciente:
- Porque la atmósfera resulta tan asfixiante e inquietante, con esas marismas que parecen no tener fin, que se convierte en un personaje más de la historia.
- Porque los actores que interpretan a los policías, Javier Gutiérrez y Raúl Arévalo, hacen de la contención el mejor arma para transmitir la complejidad de sus convicciones en una situación tensa.
- Porque la trama de la desaparición de las chicas adquiere por momentos niveles de clásicos del misterio como 'El silencio de los corderos' o fenómenos recientes como 'True detective'.
- Porque el contexto político y social de 1980 se percibe de fondo pero sin que llegue a eclipsar la trama principal.
Nerea Barros y Antonio de la Torre dan vida a los padres de las chicas desaparecidas
Impresiona
Con todo ello no es de extrañar que 'La isla mínima' arrancara aplausos en el Festival de San Sebastián y cosechara tres premios: la Concha de Plata al mejor actor para Javier Gutiérrez, el premio a la fotografia para Álex Catalán y el reconocimiento de la crítica, el premio Feroz Cinemaldia, a la mejor película del certamen.
De hecho, 'La isla mínima' es un filme tan cuidado en forma y contenido que resulta dificil encontrarle algún defecto. Se trata de una película para saborear, para deleitarse en los detalles y para dejarse impresionar. Intrigante, a ratos perturbadora y con un agradecido toque cómico que aligera el peso de la atmósfera.
Jesús Castro, el chico de moda del cine español, es el primer sospechoso
La consolidación del cambio
Aseguran los expertos que el cine español ya no es lo que era. Pero eso lo intuimos desde hace tiempo, desde que las películas que se hacen en nuestro país huyen de la comedia y de los desnudos obligatorios para adentrarse en sendas más oscuras. 'La isla mínima', un thriller que bien podía haberse realizado en Hollywood, con su pareja de poli experimentado y poli joven como tantos otros títulos del estilo, confirma ese cambio.
Y si todavía necesitas que dé otra razón para convencerte de que debes ir a verla, aquí la tienes: sólo han pasado dos días, pero quiero verla otra vez.
Sin esos parajes las persecuciones no habrían resultado tan frenéticas
Nota: 9 / 10
Para recordar:
- La vis dramática del actor Javier Gutiérrez, más conocido por ser el simpático compañero de aventuras del héroe de 'Águila Roja'
- Raúl Arévalo y su facilidad para meterse en personajes complejos.
- La atmósfera asfixiante que recrean los paisajes y la fotografia de Álex Catalán
Para olvidar:
- Que Antonio de la Torre sea tan breve
La isla mínima
La isla mínima Tráiler